Incendios forestales dejan casi 50 muertos.
En medio de una ola de incendios forestales devastadores, el presidente de Chile, Gabriel Boric, confirmó que la cifra de muertos ha alcanzado los 46, con temores de que el número de víctimas continúe aumentando. Los incendios, que comenzaron el miércoles, han afectado principalmente a sectores poblados de Viña del Mar y la región turística de Valparaíso, en el centro del país.
Boric, tras sobrevolar la región afectada en helicóptero, declaró desde el Palacio de La Moneda en Santiago que «sabemos que estas (víctimas) irán en aumento», destacando la gravedad de la situación.
La magnitud de los incendios ha llevado a la declaración del estado de excepción por catástrofe en el centro y sur de Chile, incluyendo zonas turísticas clave como Viña del Mar, Limanche, Quilpué y Villa Alemana. La ministra del Interior y Seguridad Pública, Carolina Tohá, informó que los incendios han afectado aproximadamente 43 mil hectáreas.
Las autoridades chilenas han desplegado recursos significativos para combatir los incendios, incluyendo 30 brigadas, mil bomberos y 17 aviones. A pesar de estos esfuerzos, los incendios han continuado propagándose, afectando zonas pobladas y obligando a la evacuación de varios sectores.
El presidente Boric decretó el toque de queda en las comunas afectadas, entre las 8 de la mañana y el mediodía, y anunció medidas para asegurar la movilización exclusiva de servicios de emergencia. La ministra Tohá destacó que el desplazamiento de las llamas ha alcanzado una velocidad preocupante de entre 4 y 10 kilómetros por hora.
La catástrofe ha generado la evacuación de miles de personas y la destrucción de numerosas viviendas en diferentes comunidades. La ministra Tohá instó a la población a permanecer en sus hogares, atender las medidas de precaución y seguir las instrucciones de evacuación de manera inmediata cuando sea necesario.
La situación también ha afectado a otras regiones, como La Estrella y Navidad, donde incendios descontrolados han consumido viviendas y obligado a la evacuación de poblados cercanos al balneario de surf Pichilemu.
Con la magnitud y gravedad de los incendios, Chile enfrenta una de las peores tragedias ambientales y humanitarias en su historia reciente, y las autoridades continúan trabajando incansablemente para contener la situación.