Tensión en Ucrania: Estados Unidos cierra su embajada en Kiev ante un posible ataque aéreo de Rusia
En un contexto de creciente tensión en Ucrania, la embajada de Estados Unidos en Kiev cerró sus puertas temporalmente este miércoles debido a información “específica” sobre un posible ataque aéreo significativo por parte de Rusia.
En un comunicado dirigido a ciudadanos estadounidenses, la sede diplomática informó que permanecerá cerrada como medida de precaución. “La Embajada de los EE.UU. en Kiev ha recibido información específica sobre un posible ataque aéreo importante el 20 de noviembre. Como medida de precaución, la Embajada estará cerrada”, señalaron.
Asimismo, se recomendó a los ciudadanos estadounidenses en Ucrania estar preparados para refugiarse de inmediato en caso de activarse una alerta aérea. “Se han dado instrucciones a los empleados de la Embajada para que se resguarden en el lugar”, añadieron.
Este cierre ocurre en medio de una escalada en las tensiones tras la autorización de Estados Unidos para que Ucrania utilice misiles de largo alcance ATACMS contra territorio ruso, un movimiento que Moscú calificó como una provocación directa. Según el Kremlin, el uso de estos misiles este martes por parte del ejército ucraniano agrava aún más la situación, y Rusia ha acusado a Washington de “echar leña al fuego”.
Paralelamente, Rusia anunció un cambio en su doctrina nuclear, indicando que podría recurrir a armamento nuclear en caso de una ofensiva convencional que amenace su seguridad, lo que marca un punto crítico en el conflicto.
El presidente estadounidense saliente, Joe Biden, habría autorizado también el suministro de minas terrestres antipersonal a Ucrania, según informes de medios internacionales, lo que añade un nuevo capítulo de tensión en una guerra que este martes cumplió 1.000 días desde su inicio en febrero de 2022.
La embajada instó a mantenerse informados a través de medios locales y a ubicar los refugios cercanos ante una posible alerta aérea, siguiendo las instrucciones de las autoridades locales.
Con el cambio de gobierno en Estados Unidos, que verá a Donald Trump asumir la presidencia el próximo 20 de enero, se espera que las políticas respecto al conflicto en Ucrania puedan experimentar ajustes, aunque el panorama en el terreno sigue siendo incierto y volátil.