Superávit comercial en junio impulsado por el crecimiento de exportaciones

Argentina ha logrado un notable superávit comercial de 1.911 millones de dólares en junio de 2024, marcando una recuperación significativa en comparación con el déficit de 1.833 millones de dólares registrado en el mismo mes del año anterior. Este resultado, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), ha sido impulsado principalmente por el crecimiento en las exportaciones, que han mostrado un incremento sólido a pesar de un contexto económico global desafiante.

Las exportaciones argentinas totalizaron 6.590 millones de dólares en junio, lo que representa un aumento del 21,7% respecto al mismo mes del año anterior. Este crecimiento se ha debido en gran medida a un incremento del 30,2% en las cantidades exportadas, aunque los precios promedio de exportación experimentaron una disminución del 6,6%. Los productos primarios han sido un motor clave de este crecimiento, con un valor de exportación de 1.785 millones de dólares y un aumento del 40,1% respecto al año anterior.

Contrariamente al crecimiento de las exportaciones, las importaciones argentinas han caído significativamente, totalizando 4.679 millones de dólares, una reducción del 35,4% en comparación con junio de 2023. Esta caída se debe tanto a una disminución del 34,5% en las cantidades importadas como a una reducción del 1,7% en los precios de los bienes importados. Los bienes intermedios y las piezas y accesorios para bienes de capital han sido los más afectados, con descensos del 37,6% y 37,3% respectivamente.

El informe del INDEC destaca el desempeño de distintos sectores en este contexto de superávit. Los productos primarios y las manufacturas de origen agropecuario han mostrado los mayores aumentos en las exportaciones. En contraste, los bienes de capital y los bienes intermedios han experimentado las mayores caídas en las importaciones, reflejando una menor demanda interna y posiblemente una reducción en la actividad industrial y de construcción.

Entre los principales socios comerciales de Argentina, China ha sobresalido con un aumento del 122,9% en las exportaciones argentinas, alcanzando un total de 1.051 millones de dólares. Brasil, el segundo destino más importante, registró exportaciones por 990 millones de dólares, un 9,0% más que en junio de 2023. Sin embargo, las importaciones desde Brasil cayeron un 52,0%, sumando 986 millones de dólares.

El comercio con la Unión Europea y Estados Unidos también presentó variaciones significativas. Las exportaciones a la Unión Europea aumentaron un 36,5%, mientras que las importaciones disminuyeron un 17,7%. En el caso de Estados Unidos, las exportaciones argentinas crecieron un 22,8%, pero las importaciones cayeron un 30,8%. Estos cambios reflejan las dinámicas económicas y comerciales globales, así como las políticas internas de estos países.

El saldo comercial positivo registrado en junio de 2024 se enmarca en un contexto de desafíos y oportunidades para la economía argentina. La capacidad de mantener y aumentar este superávit dependerá de varios factores, incluyendo la evolución de los precios internacionales de los productos exportados, la demanda global y la capacidad del país para diversificar sus mercados de exportación. El gobierno argentino ha señalado la importancia de continuar promoviendo políticas que fomenten las exportaciones y atraigan inversiones extranjeras.

El gobierno argentino ha implementado varias políticas para apoyar el crecimiento de las exportaciones y reducir las importaciones no esenciales. Entre estas políticas se encuentran incentivos fiscales para los exportadores, acuerdos comerciales estratégicos y medidas para mejorar la competitividad de los productos argentinos en los mercados internacionales. Además, se han establecido programas para diversificar la base exportadora del país, enfocándose en sectores con alto potencial de crecimiento.

Las proyecciones para el resto del año sugieren que Argentina podría continuar registrando superávits comerciales, aunque la magnitud de estos dependerá de factores externos e internos. La situación económica global, la estabilidad política en el país y la capacidad del sector privado para adaptarse a las nuevas realidades del comercio internacional serán determinantes clave.