El Gobierno felicita a las Fuerzas de Seguridad por su actuación en el Congreso.

El Gobierno argentino, a través de la cuenta oficial de la Oficina del Presidente, ha felicitado a las fuerzas de seguridad por su intervención durante los violentos enfrentamientos ocurridos afuera del Congreso de la Nación. En un mensaje contundente, se afirmó que los manifestantes, a los que se describió como «grupos terroristas», intentaron perpetrar un golpe de Estado. El debate sobre la polémica Ley Bases dentro del recinto se vio marcado por la violencia en las calles.

La tensión comenzó cuando manifestantes, pertenecientes a organizaciones sociales, piqueteras, de izquierda, peronistas, de derechos humanos, asambleas barriales y sindicatos, se reunieron en la Plaza de los Dos Congresos. El conflicto estalló alrededor de las 14:00 horas, cuando los primeros enfrentamientos con la policía comenzaron. Los manifestantes lanzaron piedras, bombas molotov y granadas, mientras la policía respondió con gases lacrimógenos y balas de goma.

Las calles alrededor del Congreso se convirtieron en un campo de batalla. Los enfrentamientos más intensos ocurrieron frente al edificio histórico y en las esquinas de Callao y Rivadavia, y Entre Ríos e Yrigoyen. Los manifestantes prendieron fuego a automóviles y causaron numerosos destrozos. Un auto de Cadena 3 fue volcado e incendiado, lo que aumentó la sensación de caos y violencia.

Acciones de la Policía

Respuesta de las Fuerzas de Seguridad

Más de 600 efectivos de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, la Policía Federal, la Gendarmería Nacional y la PSA participaron en el operativo. Utilizaron camiones hidrantes y dispararon balas de goma para dispersar a los manifestantes. La violencia se mantuvo por más de tres horas, con la policía tratando de contener a los atacantes que reaparecían continuamente.

Arrestos y Heridos

Hasta las 19:00 horas, se habían detenido a 20 personas, 11 por la Policía de la Ciudad y 9 por la Policía Federal. Entre los detenidos, se encontraba un hombre de 41 años con una granada de Fabricaciones Militares. Además, cinco efectivos, incluidos dos policías y tres gendarmes, resultaron heridos de gravedad y fueron trasladados al hospital Churruca.

Declaraciones del Gobierno

Felicitaciones y Condena

En un comunicado emitido por la Oficina del Presidente, se felicitó a las fuerzas de seguridad por su «excelente accionar reprimiendo a los grupos terroristas». El mensaje subrayó que estos grupos intentaron interrumpir el normal funcionamiento del Congreso, describiendo sus acciones como un intento de golpe de Estado.

Reacciones Políticas

Declaraciones del Presidente

El presidente Javier Milei expresó su respaldo a las fuerzas de seguridad y condenó enérgicamente la violencia de los manifestantes. En su programa radial, reafirmó su compromiso con la ley y el orden, destacando que no permitirá que actos de terrorismo interfieran con el proceso democrático.

Varios diputados de la oposición criticaron la respuesta de las fuerzas de seguridad y la retórica del gobierno. Acusaron a las autoridades de emplear tácticas represivas y de exagerar la amenaza para justificar el uso excesivo de la fuerza. Los legisladores afectados por los gases lacrimógenos también expresaron su indignación y pidieron una investigación sobre el manejo de la situación.

Los violentos enfrentamientos y la retórica del gobierno sobre un intento de golpe de Estado plantean preguntas serias sobre la estabilidad democrática en Argentina. Si bien es fundamental mantener el orden, es igualmente crucial proteger los derechos de los manifestantes pacíficos y garantizar que las respuestas de las fuerzas de seguridad sean proporcionadas y justificadas.

El derecho a la protesta es un componente esencial de cualquier democracia. Los eventos en el Congreso subrayan la necesidad de un equilibrio entre la seguridad pública y el respeto por los derechos de los ciudadanos. Es imperativo que el gobierno y las fuerzas de seguridad implementen estrategias que permitan la expresión pacífica de la disidencia sin recurrir a la violencia excesiva.