Crisis humanitaria en África oriental: más de 48 millones de personas sufren hambre severa.
La Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) ha emitido un comunicado alarmante este viernes, revelando la crítica situación que enfrentan más de 48,2 millones de personas en África oriental, donde el hambre severa se ha convertido en una realidad devastadora.
La región, compuesta por países como Etiopía, Kenia, Somalia, Sudán del Sur y Sudán, ha visto empeorar sus necesidades humanitarias durante el último año debido a una combinación de factores catastróficos. Fenómenos climáticos graves, como sequías e inundaciones exacerbadas por el fenómeno meteorológico El Niño, han desencadenado condiciones extremas que han dejado a millones de personas en una situación de extrema vulnerabilidad.
El conflicto armado también ha contribuido significativamente a la crisis, con millones de personas desplazadas internamente y millones más convertidas en refugiados o solicitantes de asilo. Países como Sudán y Etiopía han experimentado una de las mayores crisis de desplazamiento del mundo, exacerbando aún más la inseguridad alimentaria y la malnutrición.
La situación se agrava con el aumento de brotes de enfermedades como el cólera, el sarampión y la malaria. Solo en febrero pasado, se reportaron más de 80.000 casos de cólera y cerca de 34.000 casos de sarampión en toda la región. La falta de acceso a agua potable y otros recursos básicos debido a las catástrofes naturales desencadenadas por el cambio climático ha contribuido a la propagación de estas enfermedades infecciosas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido sobre el papel fundamental que juega la crisis climática en este escenario, subrayando la necesidad urgente de intensificar los esfuerzos a nivel global para brindar asistencia humanitaria a las poblaciones afectadas en África oriental. Además, es crucial abordar las causas subyacentes de esta crisis, incluyendo el cambio climático, los conflictos armados y la inestabilidad económica, para lograr una solución sostenible a largo plazo.
