Ucrania promociona su «Plan de Victoria» antes de reunirse con aliados tras eliminar a un «criminal de guerra» ruso
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, ha anunciado el lanzamiento de su ambicioso “Plan de Victoria” con el objetivo de detener la agresión rusa. Esta estrategia será presentada durante la reunión de Ramstein el 12 de octubre de 2024, donde se congregarán más de 50 líderes mundiales para discutir la situación en Ucrania y los siguientes pasos en la lucha contra la invasión rusa.
Estrategia hacia la paz: «Plan de Victoria»
El presidente Zelensky compartió el anuncio a través de un video de campaña en el que se detalla la importancia de este plan para reforzar a Ucrania y llevar a la guerra a un final justo. «Tenemos una estrategia clara para avanzar hacia un final justo de la guerra, con paz a través de la fuerza. El plan de victoria describe el necesario refuerzo de Ucrania», dijo Zelensky en el video.
Este plan, cuyos detalles permanecen en secreto, ya fue presentado previamente al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, así como a los candidatos presidenciales estadounidenses, la vicepresidenta Kamala Harris y Donald Trump, durante la visita de Zelensky a Washington el mes pasado. Ahora, el enfoque será someter la propuesta a la consideración de los aliados durante la reunión de Ramstein, que marcará la vigésimo quinta reunión de aliados desde que comenzó la guerra.
Reunión de Ramstein: ¿Qué espera Ucrania?
En la reunión, los líderes mundiales debatirán qué tipo de armamento es esencial para que Ucrania continúe resistiendo la agresión rusa y avance hacia la victoria. Entre las principales solicitudes de Ucrania se encuentran proyectiles, artillería y sistemas de defensa aérea. Zelensky ha dejado claro que, para asegurar la victoria, la determinación de sus socios internacionales debe materializarse con un aumento significativo en las capacidades de largo alcance y el refuerzo de las posiciones ucranianas en las líneas del frente.
Un portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos confirmó que el plan de Ucrania incluye «una serie de pasos productivos», y aseguró que el gobierno estadounidense trabajará estrechamente con Kiev para ejecutarlo. Aunque los detalles del plan permanecen clasificados, se espera que esta estrategia incluya tácticas tanto militares como diplomáticas para presionar a Rusia y forzarla a aceptar la paz en términos favorables para Ucrania.
La eliminación de un «criminal de guerra» ruso
Mientras el gobierno ucraniano avanza con su estrategia global, ha celebrado la eliminación de un alto funcionario ruso implicado en crímenes de guerra. Andrei Korotkiy, quien trabajaba en el departamento de seguridad de la planta nuclear de Zaporizhia, fue asesinado el viernes mediante una explosión de coche bomba en las cercanías de su domicilio en el sur de Ucrania. Este ataque fue rápidamente reivindicado por la inteligencia militar ucraniana.
Korotkiy había sido acusado por Ucrania de colaborar con las fuerzas rusas y de haber entregado información sobre los empleados de la planta nuclear con opiniones proucranianas. Según la Dirección General de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania, Korotkiy participó en la represión de los ucranianos en la región ocupada y su asesinato fue descrito como un acto de justicia por sus crímenes de guerra.
Un video compartido por la agencia de inteligencia HUR de Ucrania muestra el momento de la explosión, en el que el coche de Korotkiy estalla en llamas mientras circulaba por una carretera cercana a su hogar.
Respuesta rusa y reacciones internacionales
El Kremlin ha condenado el asesinato, calificándolo como un «acto horrible e inhumano». Yuri Chernichuk, director de la planta nuclear de Zaporizhia, criticó duramente el ataque y aseguró que los empleados que garantizan la seguridad de las instalaciones nucleares no deberían ser objetivo de atentados. «Atacar a los empleados que garantizan la seguridad de las instalaciones nucleares es una medida imprudente y escandalosa», dijo Chernichuk.
Por su parte, Rusia ha intensificado sus operaciones en el frente de batalla. El Kremlin anunció el sábado la captura de la aldea de Zhelanne Druhe, ubicada en la provincia de Donetsk, parcialmente ocupada por fuerzas rusas. Este avance se produce tres días después de que las tropas ucranianas se retiraran de la estratégica ciudad de Vuhledar, ubicada a 21 millas de Zhelanne Druhe, tras dos años de resistencia. La caída de Vuhledar ha sido vista como un posible indicio de que las fuerzas ucranianas están perdiendo terreno en ciertos puntos críticos del conflicto.
La retirada de Vuhledar ha encendido las alarmas sobre la posición militar de Ucrania, y algunos analistas sugieren que la negativa de Washington a permitir que Kiev ataque objetivos dentro del territorio ruso podría estar limitando las posibilidades de una contraofensiva exitosa. A pesar de estos reveses, Zelensky sigue confiando en que su “Plan de Victoria” marcará el comienzo de una nueva etapa en la guerra, con un mayor apoyo internacional y un enfoque más agresivo hacia la paz.
En los últimos meses, Ucrania ha insinuado que este plan podría ser clave para terminar con la guerra, aunque aún no se han revelado públicamente los detalles de su ejecución. Con la reunión de Ramstein a solo días de distancia, el presidente Zelensky espera obtener compromisos adicionales de sus aliados en cuanto al suministro de armamento avanzado y asistencia militar, lo que podría inclinar la balanza a favor de Ucrania en su lucha por la liberación de su territorio.