Terremoto en Japón desata alerta de tsunami.
Un potente terremoto de magnitud 7,6 ha sacudido el centro y oeste de Japón en este primer día del año. El epicentro se localizó en la península de Noto, en la prefectura de Ishikawa, desencadenando una serie de sismos que se sintieron desde la prefectura nororiental de Aomori hasta la región suroccidental de Kyushu.
Como medida de precaución, la Agencia Meteorológica Japonesa emitió la alerta de tsunami más significativa desde el desastre nuclear de Fukushima en 2011. La advertencia se extendió a lo largo de la costa occidental debido a la amenaza de olas que podrían alcanzar hasta los cinco metros.
La población en las áreas afectadas está siendo evacuada, con la prioridad de desalojar las zonas propensas a tsunamis. La Autoridad de Regulación Nuclear de Japón informó que los reactores de la planta nuclear de Shika, en Ishikawa, no presentan problemas y descartó riesgo de fuga radioactiva en instalaciones cercanas a las zonas afectadas.
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, convocó un gabinete de crisis para gestionar la situación y exhortó a la población a mantenerse alerta ante la posibilidad de nuevos sismos. Además, instó a los residentes en áreas de riesgo a evacuar de manera inmediata.
Se han registrado interrupciones significativas en los servicios de transporte, con la suspensión de los servicios ferroviarios de alta velocidad a Ishikawa. Además, las empresas de telecomunicaciones Softbank y KDDI informaron de interrupciones en los servicios telefónicos e internet en Ishikawa y Niigata.
La alerta de tsunami también se ha extendido a Rusia, específicamente a las ciudades de Vladivostok y Kakhodka, así como a la costa occidental de la isla rusa de Sajalín. Las autoridades rusas están llevando a cabo evacuaciones en áreas de riesgo.
La situación sigue siendo dinámica, y se insta a la población a seguir las instrucciones de las autoridades locales y estar preparada para posibles réplicas.