Rusia: Joven internado en un psiquiátrico por gritar «¡No a la guerra!»
Denis Jamidullin, residente de Moscú, experimentó la brutal represión del Kremlin después de pronunciar las simples palabras «¡No a la guerra!» en la plaza Roja, el corazón de la capital rusa. Este acto de valentía le valió ser detenido, trasladado a un psiquiátrico contra su voluntad y posteriormente devuelto a prisión, donde denunció haber sido inyectado con sustancias psicotrópicas que le paralizaban las piernas.
Según el portal OVD-Info, especializado en seguir las detenciones en Rusia, Jamidullin fue detenido el 28 de abril y condenado a 14 días de arresto administrativo al día siguiente por desacato a la Policía y «desprestigio» del Ejército ruso debido a sus acciones en Ucrania.
El 5 de mayo, la Policía informó a la madre de Jamidullin que su hijo había sido trasladado a un psiquiátrico bajo la acusación de agredir a los agentes del orden. Sin embargo, el 13 de mayo, Jamidullin regresó a la cárcel, donde afirmó haber sido sometido a inyecciones de sustancias psicotrópicas en el psiquiátrico, lo que le impedía caminar.
Este incidente no es aislado. Desde el inicio de la guerra en Ucrania, varias personas en Rusia han sido sometidas por la fuerza a tratamiento psiquiátrico debido a su postura antibélica, según informa The Moscow Times. Además, se han registrado numerosas detenciones arbitrarias por traición a la patria, especialmente desde el comienzo del conflicto, lo que se suma a las acusaciones de envenenamiento de dirigentes opositores contra el Gobierno ruso.
