En el vasto desierto de Arabia Saudita, en el corazón del parque arqueológico de Hegra, se ha hecho un descubrimiento que arroja nueva luz sobre la antigua civilización nabatea. Entre las docenas de ruinas que adornan el paisaje se alza imponente el Qasr al-Farid, conocido también como el «Castillo Solitario». Esta estructura tallada en una roca gigante, que se asemeja más a una tumba que a un castillo, data del siglo I, pero su incompletitud revela un fascinante misterio.

Los nabateos, maestros de la talla en piedra, tenían una técnica única de construcción, en la que esculpían sus monumentos de arriba hacia abajo. Qasr al-Farid no fue la excepción, sin embargo, su fachada nunca fue terminada. Aunque inicialmente podría considerarse un golpe contra la belleza del sitio, esta incompletitud ha resultado ser una bendición arqueológica.

Los visitantes que se aventuran a contemplar esta maravilla antigua son testigos de una vista única: los pasos precisos seguidos por los antiguos talladores antes de que el trabajo se puliera. Desde la cima de la estructura hasta su base, la artesanía y la precisión del trabajo se deterioran gradualmente, proporcionando una ventana espectacular al proceso de construcción nabateo.

El Qasr al-Farid se erige como una maravilla inolvidable en un paisaje repleto de historia y misterio. A partir de 2022, las visitas a Mada’in Salih y Hegra solo se podrán organizar a través del centro de información de Al-Ula Winter Park, lo que garantiza una experiencia segura y enriquecedora para todos los exploradores modernos que deseen sumergirse en la rica. historia de Arabia Saudita.

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