Protesta policial en misiones.
Las negociaciones entre el gobierno de Misiones y la policía provincial avanzan en medio de un clima de alta tensión, marcado por enfrentamientos y la quema de neumáticos. Los policías, que exigen mejores condiciones laborales y aumentos salariales, se manifestaron en varias ciudades de la provincia, generando disturbios y una fuerte respuesta de las autoridades.
Las protestas comenzaron hace varios días, con un número creciente de efectivos sumándose a las demandas de mejoras salariales y laborales. La situación escaló cuando los manifestantes comenzaron a quemar neumáticos y bloquear calles, provocando altercados con otras fuerzas de seguridad y ciudadanos. En algunos casos, las confrontaciones derivaron en peleas entre los mismos manifestantes y con personas que intentaban transitar por las áreas bloqueadas.
El ministro de Gobierno de Misiones, Marcelo Pérez, confirmó que se están llevando a cabo negociaciones intensivas para llegar a un acuerdo que satisfaga las demandas de los policías sin comprometer la estabilidad financiera de la provincia. «Estamos trabajando arduamente para encontrar una solución que sea justa para nuestros policías y sostenible para la provincia. Pedimos paciencia y calma a todos los involucrados», declaró Pérez.
Entre las principales demandas de los policías se encuentran un incremento salarial significativo, mejoras en las condiciones de trabajo, y un aumento en las asignaciones familiares. También reclaman la provisión de equipamiento adecuado y la garantía de un entorno laboral seguro.
En respuesta a las protestas, el gobierno provincial ha desplegado fuerzas de seguridad adicionales para mantener el orden y evitar la escalada de violencia. Sin embargo, la tensión en las calles sigue siendo palpable, con numerosos incidentes reportados en distintos puntos de la provincia.
Organizaciones de derechos humanos y diversos actores sociales han expresado su preocupación por la situación, haciendo un llamado a la paz y al diálogo constructivo. «Es crucial que las autoridades y los manifestantes encuentren un terreno común para resolver sus diferencias sin recurrir a la violencia. La seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos de Misiones deben ser la prioridad», comentó un representante de una ONG local.