Netanyahu insiste en que no habrá tregua sin el regreso de los rehenes y culpa a Hamás por la prolongación del conflicto en Gaza.
Benjamín Netanyahu, el primer ministro israelí, ha reafirmado su posición de que no habrá un acuerdo de alto al fuego en Gaza sin el regreso de los 133 rehenes que siguen en manos de Hamás. En un discurso pronunciado al cumplirse seis meses de guerra en la Franja, Netanyahu destacó que Israel no cederá ante las «exigencias extremas» de los islamistas y subrayó que la Administración del presidente estadounidense, Joe Biden, comparte esta postura.
El primer ministro israelí dejó claro que Israel no se opone a un acuerdo de alto al fuego, pero culpó a Hamás de establecer condiciones inaceptables que ponen en peligro a los ciudadanos y soldados israelíes. Según Netanyahu, ceder a estas exigencias permitiría a Hamás repetir los crímenes del 7 de octubre, fecha en la que comenzó el conflicto.
Netanyahu también instó a la comunidad internacional a presionar a Hamás en lugar de culpar a Israel, y destacó la necesidad de que Israel permanezca unido en este momento crítico. Además, responsabilizó a Irán por el ataque perpetrado por Hamás en octubre y advirtió que Israel está preparado para defenderse y atacar cualquier intento de dañarlo desde cualquier lugar.
En cuanto a la situación en Gaza, Netanyahu destacó los esfuerzos militares para debilitar a Hamás, incluida la destrucción del Hospital Al Shifa, aunque reconoció el alto costo humano de estos seis meses de conflicto. En Gaza, las cifras oficiales señalan miles de muertos y heridos, así como una devastación generalizada de la infraestructura.
Por último, Netanyahu llamó a la unidad nacional en Israel y advirtió contra la división interna que podrían aprovechar los enemigos del país. A pesar de las crecientes críticas y las demandas de elecciones anticipadas, Netanyahu enfatizó la necesidad de mantenerse unidos hasta alcanzar la victoria total en Gaza.
