Netanyahu buscará una Victoria «Completa y absoluta».
En el marco de las conmemoraciones del 75° aniversario del Parlamento israelí, el primer ministro Benjamin Netanyahu hizo fuertes declaraciones afirmando que Israel no abandonará la Franja de Gaza hasta lograr una victoria «completa y absoluta» sobre el grupo islámico Hamás. En un simbólico acto, Netanyahu aseguró que el objetivo es desmantelar a Hamás, que controla la Franja desde 2007, describiéndolo como un sistema «ficticio» sin elecciones libres ni democráticas.
Según el primer ministro, el conflicto en Gaza es «una guerra por la patria» y llamó a otras fuerzas a respaldar las decisiones del gabinete de guerra. Netanyahu destacó que esta ofensiva militar es la única manera de recuperar a los rehenes, haciendo referencia a familiares de secuestrados que recientemente irrumpieron en el Parlamento exigiendo un acuerdo con Hamás para la liberación de los prisioneros.
Netanyahu caracterizó a Hamás como «nuevos nazis» y argumentó que la erradicación del grupo es la única solución para poner fin al conflicto. Estas declaraciones generaron opiniones divididas entre la población israelí, con críticas de líderes de la oposición, como Yair Lapid, quien afirmó que el sistema político actual está roto y que Israel nunca ha estado más triste.
Opiniones en la oposición: «Knesset y gobierno, parte del problema»
El líder de la oposición, Yair Lapid, expresó en el Parlamento que Israel no tiene motivos para celebrar y que el sistema político, representado por la Knesset y el Gobierno, es parte del problema y no la solución. Lapid calificó los últimos meses como los más tristes de Israel y cuestionó la efectividad del gobierno actual.
Estas opiniones resaltan la polarización y la falta de consenso dentro de la sociedad israelí en torno a la estrategia y las declaraciones del primer ministro Netanyahu en relación con el conflicto en Gaza. La situación sigue generando intensos debates y tensiones tanto a nivel nacional como internacional.