Netanyahu acusa a la Justicia de «intentar un golpe de Estado» mientras crecen las polémicas en su gobierno

El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, arremetió contra las investigaciones judiciales que involucran a su gabinete, calificándolas de «golpe de Estado». La declaración surge tras las acusaciones de Yoram Cohen, exjefe del servicio de inteligencia Shin Bet, quien afirmó que Netanyahu ordenó vigilar a personas vinculadas a un proyecto de defensa clasificado.

En un comunicado oficial, la Oficina del Primer Ministro aseguró que Netanyahu «protegió un secreto de Estado vital» y actuó conforme a la ley, negando cualquier violación de derechos. Sin embargo, no desmintió directamente las afirmaciones de Cohen. «La verdadera amenaza a la democracia en Israel no proviene de los funcionarios electos, sino de las investigaciones políticas desenfrenadas impulsadas por las autoridades judiciales», añadió el texto.

El clima político se ha tensado aún más con la aprobación preliminar de la llamada «Ley Feldstein», que permitiría a miembros del Ejército e inteligencia filtrar información clasificada al primer ministro sin autorización. Este proyecto, calificado de «peligroso» por el portavoz militar Daniel Hagari, agrava la desconfianza entre las instituciones del Estado.

Por otra parte, el escándalo ‘BibiLeaks’ también sacude al gobierno. Eli Feldstein, portavoz de Netanyahu, y un suboficial reservista están acusados de filtrar un documento clasificado para influir en la opinión pública contra un acuerdo de alto el fuego en Gaza. Ambos permanecen bajo arresto mientras el Tribunal Supremo evalúa la apelación de la fiscalía.

A estas polémicas se suma la acusación contra Tzachi Braverman, jefe del gabinete de Netanyahu, por presunta extorsión a un oficial militar con el objetivo de manipular actas relacionadas con los ataques del 7 de octubre.

Netanyahu, quien además deberá testificar el próximo 10 de diciembre en un juicio por corrupción que enfrenta desde 2020, se encuentra en el centro de un panorama político marcado por divisiones internas y crecientes tensiones.