Mendoza: Un puma invade un barrio privado y genera pánico entre los vecinos
El pasado lunes, un inesperado visitante irrumpió en un barrio privado de la ciudad de Mendoza, generando pánico y revuelo entre los vecinos. Un puma, aparentemente desorientado y en busca de alimento, fue avistado merodeando las calles del vecindario. La aparición de este felino silvestre en una zona residencial no solo sorprendió a los habitantes, sino que también puso en marcha un operativo de rescate por parte de las autoridades locales y expertos en fauna silvestre.
Todo comenzó en las primeras horas de la mañana, cuando varios residentes del barrio privado notaron la presencia del puma. Al principio, algunos pensaron que se trataba de un perro grande o algún otro animal doméstico, pero a medida que el felino se acercaba, el miedo y la preocupación crecieron. «Estaba sacando la basura cuando lo vi. No podía creer que un puma estuviera en nuestra calle», comentó uno de los vecinos.
Las redes sociales se inundaron rápidamente con fotos y videos del puma, lo que atrajo la atención de los medios de comunicación y las autoridades. La noticia se difundió como la pólvora, y pronto llegaron al lugar equipos de rescate y personal especializado en fauna silvestre para manejar la situación.
El Operativo de Rescate
La principal preocupación de las autoridades era asegurar la integridad tanto del puma como de los residentes. El operativo de rescate fue liderado por el Departamento de Recursos Naturales de Mendoza, en colaboración con la policía local y veterinarios expertos en fauna silvestre. Se estableció un perímetro de seguridad alrededor del barrio para evitar que el puma pudiera escapar y causar más pánico o resultar herido.
Los expertos utilizaron dardos tranquilizantes para sedar al animal de manera segura. «Fue un proceso delicado. Necesitábamos acercarnos lo suficiente para disparar el dardo sin asustar al puma, lo cual podría haberlo llevado a reaccionar de manera peligrosa», explicó uno de los veterinarios a cargo.
El puma es un felino nativo de América, conocido por su capacidad para adaptarse a diversos hábitats, desde bosques hasta montañas y desiertos. En Argentina, es común en regiones como la Patagonia y los Andes. Sin embargo, la creciente expansión urbana ha provocado una disminución de su hábitat natural, obligando a estos animales a acercarse a zonas habitadas en busca de alimento.
Este incidente en Mendoza es un recordatorio de los desafíos que enfrentan los animales silvestres debido a la intervención humana en sus ecosistemas. La deforestación, la construcción de viviendas y el desarrollo de infraestructuras han fragmentado los territorios naturales de muchos animales, aumentando las posibilidades de encuentros inesperados como este.
La invasión del puma generó diversas reacciones entre los vecinos del barrio privado. Algunos se mostraron asustados y preocupados por la seguridad de sus familias y mascotas. «Tengo hijos pequeños y mascotas, y la idea de un puma suelto en nuestro barrio es aterradora», comentó una residente. Otros, sin embargo, expresaron una mezcla de asombro y curiosidad por el inesperado visitante. «Nunca pensé que vería un puma tan de cerca. Fue impresionante, pero también me hizo pensar en cómo estamos afectando su hábitat», reflexionó otro vecino.
Las autoridades locales aprovecharon la oportunidad para educar a la comunidad sobre la importancia de la conservación de la fauna y el respeto por los hábitats naturales. Se organizaron charlas informativas y se distribuyeron folletos con recomendaciones sobre cómo actuar en caso de un avistamiento similar en el futuro.
El Futuro del Puma Rescatado
Después de ser sedado y capturado, el puma fue trasladado a un centro de rehabilitación de fauna silvestre en Mendoza. Allí, veterinarios y biólogos evaluaron su estado de salud y trabajaron en su recuperación. «El puma estaba desnutrido y deshidratado, lo que indica que había estado vagando sin encontrar alimento adecuado durante algún tiempo», informó el veterinario principal del centro.
El plan a largo plazo es reintroducir al puma en su hábitat natural una vez que se recupere completamente. Sin embargo, esto requiere encontrar un área adecuada y segura donde el animal pueda vivir sin riesgo de volver a zonas habitadas. «Es un proceso que toma tiempo y requiere mucha planificación. Queremos asegurarnos de que el puma tenga una segunda oportunidad en la naturaleza», explicó uno de los biólogos.