En una dolorosa situación que ha estremecido a la ciudad de Rosario, el cuerpo sin vida de María Isabel Pereyra, una mujer jubilada de 71 años, fue descubierto en un pozo ciego dentro de la vivienda que alquilaba.

El dramático hallazgo tuvo lugar en la calle Vicente Medina al 4700 y ha desencadenado una investigación para esclarecer un posible caso de homicidio relacionado con un robo en la residencia de la víctima.

El macabro descubrimiento ocurrió este miércoles cuando uno de los nietos de Pereyra, preocupado al no recibir respuesta a sus intentos de contacto, decidió acercarse hasta la vivienda. Al entrar, se encontró con un escenario desolador: la casa estaba completamente revuelta, y varios objetos de valor, incluyendo garrafas, un televisor, un ventilador, el celular y la billetera de la jubilada, habían desaparecido.

Siguiendo el llanto del perro de la víctima, el nieto hizo un hallazgo impactante al descubrir el cuerpo de María Isabel en el pozo ciego ubicado en el fondo del terreno. Inmediatamente, se alertó a las autoridades, y tanto la Policía como los bomberos se presentaron en la escena para llevar a cabo las investigaciones pertinentes.

Aunque el cuerpo de Pereyra no mostraba signos evidentes de heridas de arma blanca o de fuego, se ha ordenado la realización de una autopsia para determinar la causa exacta de su fallecimiento, contemplando posibles escenarios como asfixia o traumatismos.

La vivienda, que la jubilada alquilaba desde hacía dos meses, evidenciaba un claro desorden, lo que apunta a la posibilidad de un robo con violencia. Este hecho ha suscitado sospechas sobre la participación de los antiguos vecinos que habitaban la casa delantera del terreno y que, según reportes, abandonaron el lugar.

La investigación del caso está a cargo del fiscal de Homicidios en turno, Patricio Saldutti, quien liderará las diligencias necesarias para esclarecer este trágico suceso. La comunidad de Rosario se encuentra consternada por esta pérdida y aguarda respuestas sobre las circunstancias de la muerte de María Isabel Pereyra.

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