Macabro hallazgo en cementerio de La Plata.
En medio de una rutinaria auditoría en un cementerio de La Plata, un grupo de auditores se topó con una escena aterradora: restos humanos apilados en bolsas de consorcio y ataúdes, abandonados a su suerte en condiciones inaceptables. El fétido olor emanaba de bóvedas donde los cuerpos, muchos de ellos aparentemente pertenecientes a niños, estaban expuestos al calor y a las lluvias.
En total, se encontraron 501 ataúdes y 200 bolsas de consorcio con restos humanos en cuatro áreas diferentes del camposanto. La mayoría de los cadáveres carecían de identificación, y varios de los ataúdes llevaban la inquietante inscripción «angelitos», sugiriendo la presencia de niños entre las víctimas.
La Municipalidad reaccionó de inmediato, presentando una denuncia penal ante la Unidad Fiscal de turno y solicitando una investigación exhaustiva sobre posibles delitos relacionados con el manejo negligente de los cuerpos. Aunque el olor putrefacto obstaculiza el trabajo, las autoridades se comprometieron a identificar a los fallecidos y proporcionar un entierro digno.
El deterioro del lugar se señaló como un acto deliberado, según la Dirección Provincial de Registro de Personas Desaparecidas del Ministerio de Seguridad bonaerense. Tanto los ataúdes como las bolsas estaban almacenados sin ningún cuidado, en depósitos inapropiados como el denominado «Protectora» y la «sala de velatorios». El segundo piso del edificio del cementerio y el «galpón de arena» también revelaron un macabro escenario con cajones y bolsas de consorcio desparramados.
Este impactante descubrimiento plantea serias preguntas sobre la gestión y la supervisión del cementerio, así como la falta de identificación de los cuerpos. Las autoridades trabajan incansablemente para abordar esta situación escalofriante y garantizar que los responsables sean llevados ante la justicia. La comunidad espera respuestas claras y acciones contundentes para prevenir incidentes similares en el futuro.
