Los misteriosos mares de Somalia.
En las profundidades del océano, frente a las costas de Somalia, se encuentra una de las maravillas más enigmáticas y sorprendentes del mundo marino: los mares lechosos. Esta zona bioluminiscente, del tamaño aproximado de Connecticut, ha sido durante mucho tiempo un tema folclórico en el mundo de la navegación, pero no fue hasta 2005 que la ciencia la reconoció oficialmente.
Conocida como el «mar lechoso», esta área resplandeciente ha desconcertado a los científicos durante años. Según los relatos, las aguas se iluminan con un brillo misterioso, creando un espectáculo surrealista que ha cautivado la imaginación de marineros y escritores por igual. Incluso Julio Verne mencionó este fenómeno en su obra «20.000 leguas de viaje submarino», describiéndolo como un mar de leche debido a la presencia de pequeños gusanos luminosos.
A pesar de estas historias, la comunidad científica inicialmente ignoró tales relatos, considerando que la concentración de bacterias necesaria para crear un área resplandeciente tan masiva era imposible. Sin embargo, el científico Steve Miller decidió investigar más a fondo.
Después de buscar registros del fenómeno en Internet, Miller encontró los relatos del SS Lima, que cruzó los mares lechosos en 1995. Utilizando datos de archivo del Programa de Satélites Meteorológicos de Defensa de EE. UU., Miller y su colega Steve Haddock lograron superponer las coordenadas del SS Lima con imágenes satelitales. Para su asombro, descubrieron una enorme área brillante frente al cuerno de África.
Se cree que este fenómeno está causado por la bacteria bioluminiscente Vibrio harveyi. Esta área brillante, que mide más de 15.400 kilómetros cuadrados, fue vista por satélite durante tres noches consecutivas a finales de enero. Sin embargo, aún queda por descubrir cómo puede existir una congregación tan grande de bacterias en esta zona del océano.
Los mares lechosos de Somalia continúan siendo un misterio fascinante para la ciencia, ofreciendo una visión única y sorprendente del mundo submarino. Su descubrimiento ha redefinido nuestra comprensión de la vida marina y nos recuerda la inmensa belleza y complejidad de los océanos de nuestro planeta.