La ofensiva Israelí en Gaza se intensifica: Ataques en Rafah y la crisis humanitaria en aumento
La ofensiva israelí en la Franja de Gaza continúa escalando, con ataques intensificados en la ciudad de Rafah, al sur del enclave palestino. Esta operación militar, parte de la campaña más amplia de Israel contra grupos militantes en Gaza, ha resultado en un aumento significativo de la violencia y las bajas civiles, exacerbando la ya crítica situación humanitaria en la región.
En las últimas semanas, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han llevado a cabo una serie de ataques aéreos y operaciones terrestres en el sur de Gaza. Rafah, una ciudad cercana a la frontera con Egipto, ha sido uno de los principales focos de estos ataques. Los bombardeos han destruido infraestructuras clave, incluidas viviendas, hospitales y escuelas, causando un gran número de víctimas civiles y desplazando a miles de personas.
El ejército israelí ha afirmado que sus operaciones están dirigidas contra infraestructuras y operativos del grupo militante Hamas, al que acusa de lanzar cohetes contra ciudades israelíes y de utilizar a civiles como escudos humanos. Sin embargo, los críticos argumentan que los ataques indiscriminados han causado un sufrimiento desproporcionado a la población civil de Gaza.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) ha informado de un aumento alarmante en el número de víctimas civiles. Según los últimos datos, más de 1,000 personas han muerto y otras 5,000 han resultado heridas desde el inicio de la ofensiva. Entre las víctimas se encuentran mujeres y niños, muchos de los cuales quedaron atrapados bajo los escombros de los edificios bombardeados.
La intensificación de los ataques ha obligado a miles de familias a abandonar sus hogares. Los refugios de emergencia, gestionados por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA), están desbordados y enfrentan una escasez crítica de suministros básicos como agua, alimentos y medicamentos. La situación sanitaria es particularmente preocupante, con brotes de enfermedades infecciosas debido a la falta de agua potable y condiciones de hacinamiento.
La comunidad internacional ha respondido con una mezcla de condena y llamados a la paz. Naciones Unidas, la Unión Europea y diversas organizaciones de derechos humanos han instado a ambas partes a cesar las hostilidades y reanudar las negociaciones de paz. El Secretario General de la ONU, António Guterres, ha calificado la situación en Gaza como «insostenible» y ha pedido un alto el fuego inmediato para permitir la entrega de ayuda humanitaria a las áreas más afectadas.
El Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha defendido la ofensiva como una medida necesaria para proteger a los ciudadanos israelíes de los ataques con cohetes. Netanyahu ha reiterado que Israel tiene el derecho y el deber de defenderse contra las amenazas terroristas y ha asegurado que las operaciones militares continuarán hasta que Hamas sea debilitado significativamente.
Por su parte, Hamas ha prometido continuar su resistencia armada contra lo que considera una ocupación ilegal de territorio palestino. Los líderes del grupo han llamado a la comunidad internacional a condenar las acciones de Israel y han pedido apoyo para la población de Gaza. Los ataques con cohetes desde Gaza hacia territorio israelí han continuado, causando daños materiales y sembrando el miedo entre la población civil.