La minería submarina amenaza los fondos Oceánicos.

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La explotación comercial de los fondos marinos se presenta como una creciente amenaza para los ecosistemas marinos, según advierten Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) como Greenpeace. A medida que la demanda de recursos en tierra sigue en aumento, la industria minera ha dirigido su atención hacia las riquezas submarinas, sin tener en cuenta los posibles impactos devastadores en la biodiversidad marina.

A pesar de que solo hemos explorado aproximadamente el 1% del lecho marino a nivel mundial, diversas empresas ya han implementado métodos invasivos y perjudiciales para extraer materiales esenciales para la fabricación de productos cotidianos, como baterías y dispositivos electrónicos. El uso de bombas masivas y la liberación de combustibles y productos químicos al mar plantean riesgos significativos para la vida marina y sus hábitats.

Conservacionistas y defensores del medio ambiente han expresado su preocupación acerca de las posibles consecuencias irreversibles que la minería submarina podría tener en los ecosistemas marinos, los cuales carecen de protocolos ambientales sólidos para su protección. La extracción de nódulos, que sirven como hogar para miles de peces, se ha convertido en una práctica particularmente alarmante.

En un intento de abordar estas preocupaciones, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha adoptado el Tratado de Alta Mar, que busca establecer medidas de protección para estos territorios. Sin embargo, la efectividad de este tratado depende de la ratificación de los países, y hasta ahora, son pocos los que han dado ese paso crucial. Se hace un llamado urgente a la comunidad internacional para que más naciones ratifiquen este tratado y se comprometan a salvaguardar los fondos marinos de los peligros de la minería submarina.

La preservación de la biodiversidad y la salud de los océanos debe ser una prioridad global, y es imperativo tomar medidas concretas para regular y limitar las actividades de la minería submarina antes de que sus impactos se vuelvan irreversibles.

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