La Importancia de las ventajas competitivas en la inversión en acciones
Hay conceptos más cruciales a la hora de invertir en acciones de empresas individuales: las ventajas competitivas. Este conocimiento no solo nos permitirá ignorar a las empresas de peor calidad, sino también centrarnos en los mejores negocios del mundo, aprovechando el interés compuesto a largo plazo. A lo largo de este artículo, responderemos a preguntas fundamentales como ¿Qué son las ventajas competitivas?, ¿por qué son tan importantes?, y ¿Qué tipos de ventajas competitivas existen? Además, ofreceremos ejemplos reales para ilustrar estos conceptos.
¿Qué son las Ventajas Competitivas?
Las ventajas competitivas son características únicas que permiten a una empresa superar a sus competidores en el mercado. Imagina una empresa que ha desarrollado un nuevo producto o servicio exitoso. Inevitablemente, otros empresarios intentarán replicar su éxito. En este escenario, es vital que la empresa original haya construido un «foso defensivo» que la proteja de la competencia emergente. Este foso defensivo es lo que llamamos ventaja competitiva.
Tipos de Ventajas Competitivas
- Ventajas en Costes: Estas se logran cuando una empresa puede operar a un coste menor que sus competidores. Esto puede deberse a economías de escala, tecnología más eficiente, mejores relaciones con los proveedores o métodos de producción avanzados. Empresas como Walmart y Amazon se benefician de economías de escala, mientras que Tesla utiliza tecnología avanzada para mantener bajos sus costes.
- Ejemplos:
- Walmart y Amazon: Compran bienes en grandes volúmenes y negocian precios más bajos con los proveedores.
- Tesla: Emplea robots altamente eficientes y procesos de automatización complejos.
- Nike: Subcontrata su producción a proveedores en países como Bangladesh.
- Inditex: Tiene la cadena de suministros más eficiente, capaz de diseñar, producir y distribuir prendas en apenas 10 días.
- Ejemplos:
- Costes de Cambio: Estos se refieren a los costes que los clientes deben asumir para cambiar de un producto o servicio a otro. Empresas con altos costes de cambio disfrutan de una base de clientes más estable y predecible.
- Ejemplos:
- SAP y Oracle: Ofrecen sistemas de planificación de recursos empresariales (ERP) que son difíciles de cambiar.
- Compañías de Teléfono: Imponen contratos con permanencia para desincentivar el cambio de compañía.
- Shopify: Cambiar de plataforma implica reconstruir la tienda online desde cero.
- Programas de Fidelización: Como los Avios de Iberia o los puntos de American Express, que incentivan a seguir con la misma marca.
- Ejemplos:
- Efectos de Red: El valor de un producto o servicio aumenta a medida que más personas lo usan. Esto es común en redes sociales, software y sistemas operativos.
- Ejemplos:
- Instagram y WhatsApp: Su valor aumenta con el número de usuarios activos.
- Airbnb y Booking: Más vendedores en la plataforma atraen a más clientes.
- Software Específico: Programas como Autodesk en arquitectura, Adobe en diseño o Git en desarrollo de software.
- Ejemplos:
- Intangibles: Estos incluyen atributos subjetivos como marca, reputación, patentes y derechos de autor.
- Ejemplos:
- Marcas de Lujo: Hermes y Louis Vuitton, que tienen una gran fuerza de marca.
- Apple: La marca más valiosa del mundo.
- Coca-Cola: Su marca es preferida aunque su producto sea similar al de otras marcas.
- Patentes en Farmacéuticas: Empresas como Pfizer y Novo Nordisk.
- Derechos de Autor en Entretenimiento: Netflix y Disney, con sagas y catálogos exclusivos.
- Ejemplos:
Comprender si una empresa tiene ventajas competitivas y si puede mantenerlas en el tiempo es clave para identificar negocios de alta calidad que ofrezcan un buen retorno a largo plazo. Invertir en empresas con sólidas ventajas competitivas permite a los inversores beneficiarse del crecimiento sostenido y la rentabilidad en el tiempo, aprovechando el poder del interés compuesto.