La Casa Blanca atribuye la disminución de muertes por fentanilo.

La lucha contra la crisis de opioides sintéticos en Estados Unidos ha sido una prioridad para la administración, y según la Casa Blanca, sus políticas de reducción de daños están comenzando a surtir efecto. Rahul Gupta, director de la Oficina Política para el Control de Drogas de la Casa Blanca, ha informado que el número de muertes por fentanilo, una droga devastadora, ha disminuido en gran medida gracias a estas medidas.

Según datos oficiales, el fentanilo, una droga 50 veces más potente que la heroína, ha sido responsable del 70% de las aproximadamente 100,000 muertes por sobredosis que ocurren anualmente en Estados Unidos. Sin embargo, Gupta señaló que durante los años 2022 y 2023 se ha observado una estabilización en el número de muertes, gracias a los esfuerzos en políticas de control y prevención.

El enfoque de la Casa Blanca ha sido amplio, incluyendo medidas de tratamiento, prevención y una inversión significativa de 83 mil millones de dólares en programas relacionados. Según Gupta, este año podría ser crucial para consolidar la tendencia a la baja en las muertes por sobredosis.

En términos de política interna, el presidente Joe Biden ha adoptado una postura más compasiva en materia de drogas, perdonando la posesión simple de marihuana. Gupta destacó que las penas relacionadas con drogas pueden tener consecuencias devastadoras para los individuos, afectando su capacidad para acceder a oportunidades educativas y laborales.

Además, Gupta abordó la cuestión del tratamiento de la adicción en el sistema carcelario, señalando que el enfoque actual ha sido ineficaz y mortal para muchos. Propuso un enfoque centrado en el tratamiento universal tras las rejas, argumentando que esto no solo reduce la reincidencia, sino que también ahorra dinero y reduce la criminalidad.

En cuanto al suministro de drogas, Gupta destacó los avances en la colaboración con China para controlar la producción y el envío de precursores químicos utilizados en la fabricación de fentanilo. Sin embargo, reconoció que aún hay desafíos significativos, especialmente en la frontera sur de Estados Unidos, donde grandes cantidades de fentanilo ingresan al país.

En resumen, la Casa Blanca está liderando una coalición internacional contra las drogas sintéticas, con un enfoque en la reducción de daños, la prevención y la colaboración internacional para abordar esta crisis que ha afectado a millones de personas en Estados Unidos y en todo el mundo.