Jornada sangrienta en Gaza: 48 civiles muertos en ataques israelíes mientras la situación humanitaria se agrava

La Franja de Gaza ha sido escenario de una de las jornadas más sangrientas desde que comenzó la escalada de violencia entre Israel y el grupo militante Hamas. En las últimas 24 horas, unos 48 civiles palestinos han perdido la vida en una serie de ataques aéreos israelíes, intensificando una crisis humanitaria que ya era crítica en la región. El conflicto, que ha dejado cientos de muertos en ambos bandos, parece no tener fin, y la comunidad internacional se muestra cada vez más preocupada por las consecuencias devastadoras que esta guerra está teniendo en la población civil.

El conflicto entre Israel y los palestinos es uno de los más antiguos y complejos del mundo. Las raíces de la disputa se remontan a principios del siglo XX, cuando comenzaron las tensiones entre las comunidades judía y árabe en la región. Tras la creación del Estado de Israel en 1948, la situación se deterioró rápidamente, con una serie de guerras y enfrentamientos que han dejado miles de muertos y millones de desplazados.

La Franja de Gaza, un pequeño territorio costero de apenas 365 kilómetros cuadrados, ha sido uno de los focos más intensos de este conflicto. Desde 2007, cuando el grupo islamista Hamas tomó el control de Gaza, el enclave ha estado bajo un bloqueo israelí que ha limitado gravemente el acceso a bienes esenciales, como alimentos, medicinas y combustible. Este bloqueo, junto con las recurrentes ofensivas militares israelíes, ha convertido a Gaza en una de las áreas más densamente pobladas y empobrecidas del mundo.

La reciente ola de violencia comenzó hace semanas, cuando Hamas lanzó una serie de cohetes hacia Israel en respuesta a las tensiones en Jerusalén Oriental, particularmente en torno a la mezquita de Al-Aqsa, un sitio sagrado tanto para musulmanes como para judíos. Israel respondió con una serie de ataques aéreos masivos sobre Gaza, dirigidos a instalaciones militares de Hamas, pero que también han causado un gran número de bajas civiles.

En esta última jornada, los ataques israelíes se han intensificado, alcanzando objetivos en zonas residenciales y causando la muerte de decenas de civiles, incluidos mujeres y niños. Las imágenes de edificios derrumbados, cuerpos bajo los escombros y hospitales desbordados han conmocionado al mundo, aumentando la presión sobre Israel para que cese sus operaciones militares.