Joe Biden firma histórico paquete presupuestario de 1,2 billones.
En un acontecimiento trascendental para la administración de Joe Biden, el presidente de Estados Unidos ha rubricado un amplio paquete presupuestario por valor de 1,2 billones de dólares, luego de que el Congreso alcanzara un acuerdo bipartidista para su aprobación.
El presidente Biden, en un comunicado emitido tras la firma del proyecto de ley, destacó la importancia de esta medida para mantener la operatividad del Gobierno, fortalecer la economía nacional y asegurar la seguridad del país. Este paquete presupuestario, resultado de arduas negociaciones entre demócratas y republicanos, representa un ejemplo concreto de compromiso bipartidista en el complicado panorama político actual.
Uno de los puntos más significativos del presupuesto es la asignación de 886.000 millones de dólares para el Departamento de Defensa, un incremento del 3% con respecto al año anterior. Además de esta partida, se han destinado fondos adicionales para áreas críticas como educación, cuidado infantil y la lucha contra el cáncer. Sin embargo, el presupuesto también incluye recortes en la ayuda a la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) y un refuerzo en la seguridad fronteriza con México, con mayor presencia de agentes y recursos para la vigilancia.
El proceso para alcanzar este acuerdo presupuestario no fue sencillo. Desde el inicio del año fiscal 2024 el 1 de octubre de 2023, demócratas y republicanos enfrentaron dificultades para llegar a un consenso, lo que llevó al Congreso a aprobar múltiples extensiones presupuestarias para evitar un cierre administrativo por falta de fondos. Esta firma final completa el presupuesto del año fiscal, sumando un total de más de 1,6 billones de dólares.
El acto de Biden en la Casa Blanca marca un hito en el proceso legislativo del país y subraya la capacidad de las fuerzas políticas para trabajar juntas en momentos cruciales para la nación. Este paquete presupuestario no solo garantiza la continuidad de las operaciones gubernamentales, sino que también representa un compromiso conjunto para abordar los desafíos económicos y de seguridad que enfrenta Estados Unidos en la actualidad.