Japón y Australia se unen en un estudio pionero sobre drones submarinos.
Japón y Australia han anunciado su primer proyecto conjunto de defensa desde la firma de un acuerdo el verano pasado, centrado en el estudio de drones submarinos. Este paso se da en un contexto de creciente asertividad marítima por parte de China en la región del Indo-Pacífico.
El acuerdo, firmado a finales de enero pero anunciado recientemente por el Ministerio de Defensa japonés, busca fomentar la interoperabilidad de vehículos submarinos no tripulados entre ambos países. Se espera que el estudio proporcione información valiosa sobre las capacidades de estos drones en misiones como la detección de minas, entre otras.
En el marco del proyecto, se llevarán a cabo comunicaciones submarinas utilizando información recopilada por cada país sobre sus entornos marítimos. La científica jefe del Ministerio de Defensa australiano, Tanya Monro, resaltó la importancia de mantener una ventaja tecnológica en un entorno estratégico que cambia rápidamente.
Monro también indicó que este proyecto permitirá a Japón y Australia alcanzar resultados que no podrían lograr por separado, sentando las bases para investigaciones conjuntas futuras sobre autonomía robótica y colaborativa.
Las relaciones de defensa entre Japón y Australia se han fortalecido en los últimos años, y ambas naciones están explorando posibles colaboraciones en áreas como la seguridad aérea. El proyecto conjunto sobre drones submarinos refleja el interés compartido en abordar desafíos regionales y fortalecer la seguridad en el Indo-Pacífico.
Este anuncio también llega en un momento en que la asertividad marítima de China ha generado tensiones en la región. Australia ha expresado previamente su preocupación por incidentes relacionados con la Marina china, subrayando la importancia de la cooperación regional para abordar desafíos comunes.
En una entrevista reciente, el viceprimer ministro y ministro de Defensa australiano, Richard Marles, manifestó su esperanza de que Japón participe en el futuro en la alianza estratégica militar AUKUS, compuesta por Australia, Estados Unidos y el Reino Unido, para desarrollar tecnologías de defensa, superando las limitaciones actuales impuestas por las normativas japonesas.
