Jack Nicholson, nacido el 22 de abril de 1937 en Neptune City, Nueva Jersey, es uno de los actores más icónicos y respetados de la industria del cine. Con una carrera que abarca más de seis décadas, Nicholson ha dejado una huella imborrable en la historia del cine, tanto por su talento actoral como por su personalidad magnética y carismática fuera de la pantalla.

Nicholson creció en Neptune City, Nueva Jersey, donde asistió a la escuela secundaria antes de mudarse a Los Ángeles a principios de la década de 1950. Sus primeros años en Hollywood fueron difíciles, pero eventualmente encontró su camino en la actuación, debutando en películas como «The Cry Baby Killer» (1958) y «The Little Shop of Horrors» (1960).

Fue en la década de 1960 cuando Nicholson comenzó a ganar reconocimiento por su trabajo en el cine independiente, colaborando estrechamente con el director Roger Corman en varias películas de culto como «The Raven» (1963) y «The Trip» (1967). Su actuación en «Easy Rider» (1969), dirigida por Dennis Hopper, le valió su primera nominación al Premio de la Academia como Mejor Actor de Reparto.

Sin embargo, fue en la década de 1970 cuando Nicholson alcanzó la cima de su carrera con una serie de actuaciones inolvidables que lo consagraron como uno de los mejores actores de su generación. Su papel más emblemático llegó en 1975 con «One Flew Over the Cuckoo’s Nest», donde interpretó al carismático y rebelde Randle McMurphy, ganando su primer Premio de la Academia al Mejor Actor por esta actuación.

A lo largo de su carrera, Nicholson ha acumulado un impresionante número de premios y reconocimientos, incluyendo tres Premios de la Academia y un total de doce nominaciones, lo que lo convierte en el actor masculino más nominado en la historia de los Premios de la Academia. Su versatilidad como actor le ha permitido destacarse en una amplia variedad de géneros, desde el drama hasta la comedia y el thriller.

Entre sus grandes éxitos se encuentran películas como «Chinatown» (1974), «The Shining» (1980), «Terms of Endearment» (1983), «Batman» (1989), «A Few Good Men» (1992) y «As Good as It Gets» (1997), entre muchas otras. Su capacidad para encapsular la complejidad y la humanidad de sus personajes lo ha convertido en una figura legendaria en la historia del cine.

Además de su trabajo en la pantalla, Nicholson también ha destacado como director y guionista, con películas como «Drive, He Said» (1971) y «The Two Jakes» (1990) en su haber. Fuera del mundo del cine, es conocido por su estilo de vida extravagante y su personalidad franca y sin filtros, lo que lo ha convertido en una figura muy admirada y respetada en Hollywood.

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