Israel responde a los ataques de la Yihad Islámica bombardeando una fábrica de cohetes
En respuesta a los recientes ataques de la Yihad Islámica desde Gaza, Israel bombardeó una instalación subterránea de fabricación de cohetes en Rafah, considerada la más importante del grupo. Este sitio producía cientos de cohetes y proyectiles de largo alcance. El ataque israelí se realizó tras el lanzamiento de 20 proyectiles por parte de la Yihad Islámica, de los cuales la mayoría fueron interceptados y otros cayeron sin causar víctimas. Además, Israel ordenó evacuaciones en varios barrios del sur de Gaza.
Desde hace años, la región de Gaza ha sido escenario de enfrentamientos entre Israel y grupos armados como la Yihad Islámica. Estos grupos han utilizado instalaciones subterráneas para la fabricación de armas, lo que ha llevado a Israel a realizar operaciones militares específicas para desmantelar estas capacidades. La reciente escalada es parte de un conflicto más amplio que afecta a la seguridad y estabilidad de la región.
Operación Militar de Israel
El ejército israelí informó que la operación fue «precisa y basada en inteligencia», destacando que atacaron tanto a los militantes en superficie como a las instalaciones subterráneas. La incursión fue llevada a cabo por la 162 División del Ejército israelí, utilizando drones y misiles guiados para neutralizar a los milicianos y destruir la infraestructura de fabricación de cohetes.
La destrucción de la fábrica de cohetes representa un golpe significativo para la capacidad de la Yihad Islámica de lanzar ataques contra Israel. Según el ejército israelí, este sitio era crucial para la producción y lanzamiento de cohetes hacia comunidades civiles en Israel. Además, se espera que esta acción tenga repercusiones en la dinámica del conflicto en la región, afectando las estrategias y capacidades operativas de la Yihad Islámica.
En respuesta a los ataques, Israel ordenó evacuaciones en varios barrios del sur de Gaza, incluyendo Jan Yunis y sus alrededores. Las autoridades israelíes pidieron a los residentes que se dirigieran a zonas designadas como «humanitarias» para su seguridad. Esta medida se suma a los desplazamientos forzados que muchos gazatíes han enfrentado a lo largo del conflicto, exacerbando la crisis humanitaria en la región.
La comunidad internacional sigue de cerca la escalada del conflicto entre Israel y la Yihad Islámica. La respuesta militar de Israel y los continuos ataques desde Gaza han generado preocupación por el aumento de la violencia y sus implicaciones para la estabilidad regional. Organizaciones internacionales y varios gobiernos han llamado a la moderación y al diálogo para evitar una mayor escalada del conflicto.
