Incidente en el puente fronterizo de Salta: Un nuevo foco de tensión entre Argentina y Bolivia

Un reciente incidente en el puente fronterizo Salvador Mazza-Yacuiba ha encendido alarmas diplomáticas entre Argentina y Bolivia. Según reportes, la policía boliviana habría ingresado a territorio argentino durante el desalojo de una protesta, lo que podría derivar en una nueva crisis entre ambos países.

El domingo pasado, fuerzas de seguridad bolivianas desalojaron una manifestación de aproximadamente 150 trabajadores de la salud que bloqueaban el paso fronterizo en demanda de más personal médico en la región. En medio del desalojo, la policía boliviana presuntamente cruzó al lado argentino para arrestar a dos médicos que huían de los gases lacrimógenos y la violencia.

La Cancillería argentina está investigando el incidente para confirmar si efectivamente hubo una incursión en su territorio. De ser cierto, este hecho podría incrementar las tensiones entre los gobiernos de Javier Milei y Luis Arce, quienes ya han tenido enfrentamientos diplomáticos en el pasado.

Las relaciones entre Argentina y Bolivia no han sido las mejores en los últimos tiempos. El pasado 26 de junio, se denunció un intento de golpe de Estado en Bolivia, lo que llevó a un cruce de declaraciones entre ambos gobiernos. La administración de Milei desestimó las denuncias bolivianas, calificándolas de fraudulentas, lo que llevó a Bolivia a llamar a consultas a su embajador en Buenos Aires.

En este nuevo incidente, la protesta en el puente fronterizo estaba causando numerosos problemas, con vehículos varados y mercancías sin poder ser distribuidas. Durante el desalojo, varias mujeres resultaron heridas, según videos difundidos en redes sociales y medios de comunicación.

Desde el gobierno boliviano, se atribuyeron las protestas a personas vinculadas al ex presidente Evo Morales, quien está en conflicto con el actual mandatario, Luis Arce. En la región de Yacuiba, también se reportaron otras acciones de protesta lideradas por gremialistas que impidieron el abastecimiento de combustible.

El ministro de Gobierno boliviano, Eduardo Del Castillo, acusó al alcalde de Yacuiba, Carlos Bru, cercano a Morales, de instigar las manifestaciones. Del Castillo afirmó que había indicios de intereses políticos para perjudicar al gobierno y deslegitimarlo.

El bloqueo del puente fronterizo no solo afectó a los manifestantes y las fuerzas de seguridad, sino también a la población local que vio interrumpido su día a día. La interrupción del paso fronterizo impidió el flujo de mercancías y dejó a muchos vehículos varados a ambos lados del puente, generando pérdidas económicas y dificultades logísticas.

La situación se tornó más tensa con la intervención policial, especialmente por la presunta incursión en territorio argentino, lo que ha llevado a la Cancillería a actuar rápidamente para esclarecer los hechos y evitar un conflicto mayor.

De confirmarse la incursión de la policía boliviana en territorio argentino, las implicaciones diplomáticas podrían ser severas. Argentina y Bolivia ya tienen una historia reciente de tensiones, y este incidente podría agravar aún más las relaciones bilaterales.

El gobierno de Javier Milei ha mantenido una postura firme frente a Bolivia, y cualquier indicio de violación de la soberanía nacional será tratado con seriedad. Por otro lado, el gobierno de Luis Arce también ha mostrado determinación en defender sus acciones y acusaciones.