En un trágico suceso 1 de febrero de 1978, la música folklórica argentina perdió a uno de sus más grandes exponentes, Jorge Antonio Cafrune Herrera, conocido afectuosamente como «El Turco Cafrune». Nacido el 8 de agosto de 1937 en El Carmen, provincia de Jujuy, Cafrune dejó un legado imborrable como cantante, músico, investigador y difusor de la cultura nativa de Argentina.

Cafrune, criado en una familia de arraigadas costumbres gauchescas con antepasados de origen árabe, heredó el apodo «el Turco» de su padre, un destacado gaucho de la región. Desde joven, mostró su talento musical al unirse al grupo «Las Voces del Huayra» y más tarde, formar «Los Cantores del Alba». Sin embargo, fue en su carrera en solitario donde alcanzó la consagración, siendo reconocido en el Festival de Cosquín en 1962.

A lo largo de su carrera, Cafrune no solo cautivó con su voz y música, sino que también llevó a cabo importantes iniciativas, como la gira «De a caballo por mi Patria» en 1967, donde recorrió el país al estilo de los viejos gauchos, capturando la esencia de la cultura argentina. Además, formó un dúo con el joven Marito entre 1972 y 1974, realizando giras por Argentina, España y Francia.

En 1977, tras el fallecimiento de su padre y en medio de tiempos difíciles bajo la dictadura cívico-militar, Cafrune decidió regresar a Argentina y seguir comprometido con su arte y sus convicciones. En el Festival de Cosquín de enero de 1978, desafiando la censura, interpretó la canción prohibida «Zamba de mi esperanza», lo que supuso un acto de valentía que, según algunos testimonios, atrajo la atención de los militares.

La trágica noche del 31 de enero de 1978, Cafrune emprendió una travesía a caballo desde Plaza de Mayo hasta Yapeyú, llevando tierra de Boulogne-sur-Mer en homenaje a José de San Martín. Sin embargo, cerca de Benavídez, fue embestido por una camioneta rastrojero conducida por Héctor Emilio Díaz, resultando en la muerte de Cafrune a la medianoche, a la edad de 40 años.

Aunque se ha especulado sobre la posibilidad de un asesinato planificado por la dictadura militar, el incidente fue oficialmente considerado como un accidente. La música folklórica tiene un legado de Jorge Cafrune perdura en su música y su contribución a la preservación de la cultura nativa.

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