Hezbollah lanza un centenar de proyectiles contra Israel, que responde con bombardeos en el Líbano

El conflicto entre Israel y Hezbollah ha escalado nuevamente este domingo, con el lanzamiento de más de 150 cohetes, misiles de crucero y drones desde el Líbano hacia el norte de Israel, según informó el Ejército israelí. Los ataques fueron reivindicados por Hezbollah, el grupo militante chií respaldado por Irán, quien afirmó que sus objetivos incluían una fábrica de armamento y una base militar israelí en el distrito de Haifa.

A pesar de que la mayoría de los proyectiles fueron interceptados por los sistemas de defensa israelíes, algunos lograron impactar en territorio israelí, afectando las ciudades de Kiryat Bialik, Tsur Shalom y Moreshet. Los ataques provocaron incendios y daños materiales en varias viviendas, aunque afortunadamente no se reportaron víctimas mortales. Según el servicio de emergencias israelí Magen David Adom (MDA), al menos dos personas resultaron heridas leves y una persona se encuentra en estado moderado debido a metralla.

En respuesta a estos ataques, Israel ha intensificado sus operaciones militares en el sur del Líbano. Desde la madrugada, el Ejército israelí ha bombardeado 290 objetivos en territorio libanés, incluidos lanzadores de cohetes e infraestructuras militares de Hezbollah. Estas operaciones se suman a los ataques aéreos de la semana pasada, que resultaron en la muerte de al menos 17 combatientes de Hezbollah, entre ellos dos comandantes. También se informó de la muerte de tres menores y siete mujeres en los bombardeos en Beirut.

El portavoz internacional del Ejército israelí, Nadav Shoshani, subrayó que la situación en el norte de Israel sigue siendo crítica, con miles de niños sin poder asistir a clase y unas 60.000 personas desplazadas desde el mes de octubre. «Hezbollah es responsable de la situación en la que estamos. Ellos comenzaron esto sin provocación el 8 de octubre», afirmó Shoshani, en alusión a la ofensiva lanzada por la milicia chií en apoyo a la guerra en Gaza.

Origen del conflicto

Hezbollah ha afirmado que estos ataques forman parte de su «respuesta inicial» a la muerte de más de 30 de sus combatientes, quienes perdieron la vida tras una serie de explosiones en sus dispositivos de comunicación, un ataque atribuido a Israel. Esta escalada de violencia ha generado temores sobre la posibilidad de una guerra a gran escala en la región, aunque Hezbollah ha dejado claro que no busca un conflicto mayor. Según el grupo, sus ataques cesarían si se lograra un alto el fuego en Gaza.

La tensión entre Israel y Hezbollah ha sido constante en los últimos años, pero este último episodio refleja la fragilidad de la situación en la región y la posibilidad de que los enfrentamientos se intensifiquen si no se alcanzan acuerdos para frenar las hostilidades. Mientras tanto, las poblaciones civiles en ambos lados continúan sufriendo las consecuencias de un conflicto que parece lejos de resolverse.