Fallece Earl Holliman, leyenda de Hollywood y la televisión, a los 96 años
Studio City, California, 27 de noviembre de 2024 – Earl Holliman, reconocido actor de cine y televisión, falleció el lunes a los 96 años mientras recibía cuidados paliativos en su hogar en Studio City, California. Su pareja, Craig Curtis, confirmó la noticia al Hollywood Reporter, marcando el final de una era para un hombre cuya carrera abarcó más de cinco décadas y dejó un legado imborrable en la industria del entretenimiento.
Inicios humildes y ascenso a la fama
Nacido el 11 de septiembre de 1928 en Oil City, Luisiana, Holliman tuvo una infancia marcada por la adversidad. Huérfano desde temprana edad, fue adoptado por una familia trabajadora en su ciudad natal. Durante la Segunda Guerra Mundial, se alistó en la Marina de los Estados Unidos a los 15 años mintiendo sobre su edad, pero fue dado de baja poco después al descubrirse su verdadera edad.
Tras regresar a casa, se mudó a California para perseguir su sueño de actuar. Estudió en el Pasadena Playhouse y, mientras trabajaba en North American Aviation, se coló en los estudios de Paramount, donde su encanto y perseverancia le aseguraron su primera oportunidad en el cine con un pequeño papel en Scared Stiff (1953), protagonizada por Dean Martin y Jerry Lewis.
Éxito en el cine: de secundario a estrella premiada
La carrera de Holliman despegó rápidamente. Su gran oportunidad llegó con The Rainmaker (1956), donde interpretó a un joven idealista junto a Burt Lancaster y Katharine Hepburn. Por su actuación, Holliman recibió un Globo de Oro, consolidándose como una estrella emergente.
Participó en películas emblemáticas como Forbidden Planet (1956), un clásico de ciencia ficción; Giant (1956), junto a Elizabeth Taylor, Rock Hudson y James Dean; y Broken Lance (1954), un western que mostró su versatilidad como actor. Otros títulos notables incluyen Hot Spell (1958), Sharky’s Machine (1981) y Gunsmoke: Return to Dodge (1987).
Un icono de la televisión
Holliman también dejó una huella significativa en la televisión. En 1959, protagonizó el episodio piloto de la mítica serie The Twilight Zone, donde interpretó a un hombre con amnesia atrapado en un pueblo desierto. Su actuación cautivó a la audiencia y cimentó su reputación como un actor versátil.
En los años 70, alcanzó su mayor éxito televisivo como el teniente Bill Crowley en Police Woman (1974-1978). Compartió pantalla con Angie Dickinson, quien interpretaba a una oficial de policía encubierta. Holliman describió su dinámica en pantalla como una mezcla de humor y tensión romántica, con diálogos improvisados que encantaban a la audiencia. El programa, un éxito en NBC, contó con estrellas invitadas como Mark Harmon, Joan Collins, William Shatner y Smokey Robinson.
Activismo y contribuciones fuera de la pantalla
Además de su carrera en el entretenimiento, Holliman fue un ferviente defensor de los derechos de los animales. Durante más de 34 años, presidió Actors and Others for Animals, una organización dedicada al bienestar animal. También se desempeñó como presidente honorario de Toys for Tots, ayudando a proporcionar regalos navideños a niños necesitados.
En 1977, Holliman recibió una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, un reconocimiento a su impacto tanto en el cine como en la televisión.
Un legado duradero
Holliman también tuvo una breve carrera como cantante bajo el sello Capitol Records, aunque su pasión por la actuación siempre fue su prioridad. A lo largo de su vida, trabajó con algunas de las figuras más importantes de Hollywood y protagonizó historias que definieron la época dorada del cine y la televisión.
A pesar de su éxito, Holliman siempre mantuvo un perfil bajo fuera de la pantalla, prefiriendo dedicar su tiempo a causas benéficas y disfrutar de la compañía de amigos y colegas.