Ex promesa del Liverpool condenado por tráfico de drogas provenientes de Sudamérica.
Jamie Cassidy, una vez considerado una promesa del fútbol inglés como parte de las juveniles del Liverpool, enfrenta ahora una sentencia de cadena perpetua por su participación en un elaborado esquema de tráfico de drogas. El ex jugador de 46 años fue declarado culpable de dirigir una operación que importaba grandes cantidades de cocaína desde América del Sur hacia Europa, siendo parte de una red criminal liderada por su hermano mayor, Jonathan Cassidy, y un socio llamado Nasar Ahmed.
El negocio, que se estima involucró «cientos de kilogramos» de cocaína enviados desde Brasil, Ecuador, Colombia y Bolivia hacia Liverpool, se llevaba a cabo a través de vehículos modificados que transportaban la droga desde Países Bajos. Una vez en Inglaterra y Escocia, Jamie supervisaba la distribución con la ayuda de un grupo de cómplices.
El fiscal Richard Wright KC afirmó que Jamie tenía un papel directivo y administrativo en la operación, recibiendo un salario por su participación. La red fue descubierta luego de que las autoridades interceptaran un envío de 356 kilogramos de cocaína en marzo y abril de 2020, valuado en más de 35 millones de dólares.
El caso reveló el uso de dispositivos EncroChat, descrito como un «WhatsApp para delincuentes», utilizado por Jamie y su hermano para coordinar sus actividades ilegales. La investigación reveló que el dinero obtenido ilegalmente se lavaba a través de inversiones en bienes raíces, incluida la compra de terrenos y un antiguo cine en Liverpool.
Jonathan Cassidy, quien inicialmente evadió la redada y se refugió en Dubai, finalmente fue arrestado en octubre de 2020 al regresar al Reino Unido. Jamie, por su parte, fue detenido un mes después en su residencia, donde se encontró un teléfono encriptado.
Los tres acusados se declararon culpables de conspiración para importar drogas controladas, conspiración para suministrar drogas Clase A y conspiración para transferir propiedad criminal. La historia de Jamie, una vez destinado a una carrera en el fútbol de élite, ha conmocionado al mundo del deporte y destaca los peligros de desviarse hacia la delincuencia.