Estancamiento en la lucha contra la corrupción en América Latina.
Transparencia Internacional ha revelado que América Latina se encuentra estancada en la lucha contra la corrupción, según su Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) anual. Por quinto año consecutivo, la región obtuvo un promedio de 43 puntos sobre 100 en la escala que va de cero (muy corruptos) a cien (muy «limpios»).
Resultados en la región.
Chile y Uruguay se destacaron como los países mejor ubicados en América Latina, obteniendo 73 y 66 puntos respectivamente, lo que los posiciona como naciones percibidas con bajos niveles de corrupción. En contraste, Nicaragua y Haití obtuvieron 17 puntos, mientras que Venezuela apenas alcanzó los 13 puntos, siendo percibidos como muy corruptos.
Factores que contribuyen a la corrupción.
En una entrevista con DW, Luciana Torchiaro, consejera regional para las Américas de Transparencia Internacional, señaló que la corrupción está afectando seriamente la región. Torchiaro identificó la falta de independencia del poder judicial como un factor fundamental que contribuye a este problema, ya que el poder judicial no solo carece de control sobre otros poderes del Estado, sino que también se convierte en una maquinaria que responde a intereses particulares en lugar de los de la sociedad en general.
Además, Torchiaro mencionó que la vulneración de los derechos fundamentales, como el acceso a la información, la libertad de prensa, asociación y expresión, también contribuye al avance de la corrupción. Países como Honduras, Guatemala y El Salvador enfrentan desafíos en estos aspectos.
La consejera de Transparencia Internacional destacó que la impunidad derivada de un poder judicial débil y la falta de voces denunciantes silenciadas generan una disminución de la confianza en las instituciones públicas. Esta desconfianza lleva a la percepción de las instituciones como más corruptas, lo que, a su vez, contribuye al crecimiento de los populismos en la región.