Estados Unidos insta a un alto al fuego inmediato en Gaza.
En medio de la escalada de tensiones en la región de Medio Oriente, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, ha hecho un llamado urgente para implementar un alto al fuego en la Franja de Gaza, proponiendo un período de seis semanas de pausa en las hostilidades. Harris expresó profunda preocupación por el sufrimiento masivo en Gaza, especialmente entre mujeres que dan a luz a bebés desnutridos y niños que mueren a causa de la desnutrición y la deshidratación, subrayando la necesidad de una acción inmediata.
A pesar de la larga historia de alianza entre Estados Unidos e Israel, Harris insistió en que el gobierno israelí debe aumentar significativamente el flujo de ayuda humanitaria a Gaza, sin aceptar excusas. La vicepresidenta se reunirá este lunes con el miembro del gabinete de guerra israelí, Benny Gantz, en la Casa Blanca, para reiterar la postura estadounidense y buscar una solución que permita llevar más ayuda humanitaria a Gaza y liberar a los rehenes.
Según fuentes estadounidenses, Israel habría aceptado «más o menos» la propuesta de un alto el fuego de seis semanas, mientras que Hamás aún no está completamente de acuerdo, especialmente en lo que respecta a la categorización de «rehenes vulnerables». El plan contempla la liberación de los rehenes en Gaza y la facilitación del flujo de ayuda humanitaria.
La Casa Blanca aspira a que Israel y Palestina se comprometan a un acuerdo de alto al fuego antes del inicio del Ramadán el 10 de marzo. Las tensiones en la región han generado protestas en varias ciudades estadounidenses durante el fin de semana, con miles de personas exigiendo cambios en la política exterior de Estados Unidos, tras el ataque israelí que resultó en la trágica muerte de 115 gazatíes.
La situación sigue evolucionando, y se espera que la reunión entre Harris y Gantz arroje más luz sobre la dirección que tomarán los acontecimientos en los próximos días.