Empate entre Nacionalistas e independentistas en elecciones del País Vasco
En las elecciones regionales celebradas el domingo en el País Vasco, el Partido Nacionalista Vasco (PNV) y la formación independentista EH Bildu alcanzaron un empate de 27 escaños cada uno, mientras que el Partido Socialista de Euskadi se posicionó como la tercera fuerza con 12 diputados. Este resultado otorga al socialismo la clave para la formación del gobierno regional.
Con el 98% de los votos escrutados, el PNV requerirá del apoyo de los socialistas para alcanzar la mayoría de 38 de los 75 diputados autonómicos. Durante la campaña electoral, los socialistas ya habían mostrado su disposición para respaldar al nacionalista Imanol Pradales como lehendakari (presidente regional).
A pesar de que el PNV ha gobernado históricamente en la región, excepto por un breve período socialista, y en estas elecciones perdió cuatro escaños, lograron superar en votos a EH Bildu, que aumentó su representación en seis lugares. Por otro lado, el conservador Partido Popular obtuvo un diputado más que en la legislatura anterior, mientras que la ultraderecha de Vox mantuvo su único escaño y la plataforma de izquierda Sumar logró ingresar al Parlamento regional con un representante.
La derrota de Podemos, que perdió los seis escaños que tenía en las elecciones de 2020, y el triunfo por votos del PNV, representan un alivio para el Partido Socialista del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuya situación se habría visto afectada por una victoria de EH Bildu, dada la delicada situación de equilibrio en el Congreso de los Diputados y el amplio espectro de apoyos al Ejecutivo.
Los resultados ajustados reflejan la pluralidad de la sociedad vasca y obligarán a las fuerzas políticas a pactar durante la próxima legislatura. Tanto el candidato nacionalista, Imanol Pradales, como el socialista, Eneko Andueza, destacaron la importancia de esta pluralidad y la responsabilidad de las fuerzas políticas para construir el futuro del País Vasco en conjunto.
