Elon Musk liderará el nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental de EE. UU.
El magnate tecnológico Elon Musk anunció a través de sus redes sociales la búsqueda de «superdotados con alto coeficiente intelectual» dispuestos a trabajar más de 80 horas semanales para el recién creado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). Este organismo tiene como objetivo asesorar al presidente electo, Donald Trump, en la reducción del gasto público mediante reformas estructurales.
El nombramiento de Musk al frente del DOGE era un secreto a voces desde la campaña de Trump. Sin embargo, sorprendió la designación del empresario y excandidato presidencial republicano Vivek Ramaswamy como codirector del departamento.
¿Qué busca el DOGE?
En un mensaje publicado en X, la red social propiedad de Musk, el DOGE invitó a los interesados a enviar sus currículums a través de mensajes directos, asegurando que solo revisarán el 1% de las solicitudes más destacadas. «Necesitamos revolucionarios dispuestos a trabajar incansablemente para lograr un cambio histórico en la eficiencia gubernamental», señala el comunicado.
Una oficina con plazo limitado
El presidente electo, Donald Trump, oficializó la creación de esta oficina el pasado martes, describiéndola como un organismo externo que trabajará en conjunto con la Casa Blanca y la Oficina de Administración y Presupuesto para «crear un enfoque empresarial para el gobierno nunca antes visto».
El DOGE tiene un plazo de funcionamiento establecido: su misión concluirá el 4 de julio de 2026, coincidiendo con el 250° aniversario de la independencia de Estados Unidos.
Críticas y expectativas
La decisión de designar a dos líderes para un departamento centrado en la eficiencia ha sido objeto de críticas y comentarios sarcásticos en redes sociales. Sin embargo, la dupla Musk-Ramaswamy promete un enfoque disruptivo que busca transformar la administración pública con métodos inspirados en el sector privado.
Con la reputación de Musk como innovador y el respaldo político de Trump, este proyecto podría marcar un precedente en la gestión gubernamental, aunque no estará exento de controversias.