El Kremlin lanza advertencias nucleares a Occidente tras revisar su doctrina militar
El Kremlin ha endurecido su postura nuclear con una clara advertencia a Occidente, luego de que Rusia revisara su doctrina militar en respuesta a las tensiones derivadas de la guerra en Ucrania. El portavoz del gobierno ruso, Dmitri Peskov, afirmó este jueves que los cambios en la política nuclear tienen como objetivo disuadir a los aliados occidentales de Ucrania de participar en ataques contra Rusia.
Peskov señaló que las modificaciones anunciadas por el presidente Vladímir Putin son una «advertencia» sobre las consecuencias de cualquier ataque a Rusia, sin importar si se utilizan armas nucleares o convencionales. Esta declaración refleja el ajuste estratégico de Rusia frente a la prolongada invasión de Ucrania, con la que las tensiones se han intensificado en las fronteras rusas.
Cambios en la doctrina nuclear rusa
El miércoles, durante una reunión del Consejo de Seguridad, Putin reveló su intención de ampliar las reglas que permiten el uso de armas nucleares en caso de un ataque aéreo masivo contra Rusia. Aunque no mencionó explícitamente a Ucrania, la revisión busca disuadir a Occidente de proporcionar armas de mayor alcance a Kiev, que podrían ser utilizadas para atacar territorio ruso. Esta nueva interpretación de la doctrina parece disminuir el umbral para el uso del arsenal nuclear de Moscú, dejando abierta la posibilidad de una respuesta atómica ante amenazas convencionales que pongan en peligro la soberanía rusa.
Las recientes declaraciones del Kremlin subrayan la disposición de Rusia para emplear su capacidad nuclear en respuesta a lo que considera agresiones críticas. Putin no especificó si la doctrina modificada incluirá una respuesta nuclear automática a un ataque aéreo masivo, pero enfatizó que Rusia podría utilizar armas nucleares si se percibe una amenaza existencial.
La comunidad internacional no tardó en reaccionar. La Unión Europea, a través de su portavoz de política exterior Peter Stano, calificó las amenazas rusas como «imprudentes e irresponsables», rechazando firmemente cualquier intento de utilizar el arsenal nuclear como herramienta de intimidación. Stano enfatizó que esta no es la primera vez que Rusia recurre a amenazas nucleares para influir en las decisiones de Occidente respecto a Ucrania.
En este contexto, Estados Unidos ha sido claro en sus políticas hacia Kiev. La administración Biden ha evitado proporcionar a Ucrania armas con las que pudiera atacar profundamente en territorio ruso, manteniendo un delicado equilibrio para evitar una escalada directa con Moscú.
La doctrina nuclear rusa: fundamentos y amenazas
Desde el inicio de la guerra en 2022, el Kremlin ha utilizado con frecuencia su capacidad nuclear como herramienta de disuasión, tanto contra Ucrania como contra sus aliados. Sin embargo, las recientes modificaciones en la doctrina nuclear reflejan un cambio significativo en la estrategia militar rusa.
La política nuclear de Rusia, que durante décadas se centró exclusivamente en la disuasión, ahora contempla cuatro escenarios principales para el uso de armas nucleares:
- El lanzamiento de misiles balísticos que ataquen territorio ruso o el de sus aliados.
- El uso de armas de destrucción masiva contra Rusia o sus aliados.
- Un ataque a instalaciones críticas rusas que comprometa su capacidad nuclear.
- Una agresión con armas convencionales que amenace la existencia del Estado ruso.
Putin parece haber aludido al cuarto punto en su discurso más reciente, señalando que Rusia está preparada para utilizar armas nucleares si un ataque convencional pone en peligro la soberanía del país.
El arsenal nuclear de Rusia
Rusia posee el mayor arsenal nuclear del mundo, una herramienta clave en su política de disuasión. Según estimaciones de la Federación de Científicos Estadounidenses, Rusia cuenta con aproximadamente 5.977 ojivas nucleares, aunque se cree que cerca de 1.500 de estas están en proceso de ser desmanteladas. El resto, unas 4.500 ojivas, son consideradas activas, de las cuales alrededor de 1.500 están desplegadas en submarinos, bases aéreas y misiles balísticos intercontinentales.
La mayoría de estas armas nucleares son estratégicas, diseñadas para ser utilizadas en ataques a gran escala contra otras superpotencias. Sin embargo, Rusia también tiene un importante arsenal de armas tácticas, más pequeñas y menos destructivas, que podrían ser utilizadas en conflictos regionales como el de Ucrania. Las estimaciones sobre la cantidad de armas tácticas varían, pero la inteligencia estadounidense sugiere que Rusia tiene entre 1.000 y 2.000 de estas armas, muchas de las cuales están diseñadas para ser utilizadas por sus fuerzas armadas en el campo de batalla.
Implicaciones para el conflicto en Ucrania
Las modificaciones en la doctrina nuclear rusa se producen en un momento crítico para el conflicto en Ucrania, que ha entrado en su tercer año sin señales de resolución a corto plazo. Las fuerzas ucranianas han lanzado varios ataques en territorio ruso utilizando drones y misiles, mientras que Kiev continúa presionando a sus aliados occidentales para obtener armas de mayor alcance.
Aunque Occidente ha brindado un importante apoyo militar a Ucrania, incluidos sistemas avanzados de defensa aérea y misiles, las potencias occidentales han evitado hasta ahora proporcionar a Kiev las herramientas necesarias para atacar profundamente en territorio ruso, temiendo una escalada nuclear. La administración Biden ha sido clara en su política de restringir el uso de armas estadounidenses a territorio ucraniano, aunque la presión de Zelensky para obtener más armamento sigue siendo fuerte.
El anuncio de Putin sobre la ampliación de las condiciones para el uso de armas nucleares está destinado a reforzar este enfoque y hacer que Occidente sea aún más cauteloso a la hora de proporcionar a Ucrania sistemas de armas avanzados.