El Gobierno asegura fondos para pagos de deuda de 2025 con la compra de USD 2.701 millones al Banco Central
En preparación para los vencimientos de deuda de enero de 2025, el Ministerio de Economía, liderado por Luis Caputo, adquirió hoy USD 2.701 millones del Banco Central de la República Argentina (BCRA) usando depósitos del Tesoro en pesos. Esta transacción busca cubrir los pagos de capital e intereses de bonos y reducir el circulante en pesos, lo cual fortalece el control monetario y la acumulación de reservas.
Caputo confirmó la operación a través de sus redes sociales, destacando que la compra permitirá disminuir la base monetaria sin incrementar la emisión de pesos, manteniendo al mismo tiempo la capacidad de intervención del BCRA en el mercado cambiario. Con esta medida, el Ministerio de Economía retirará $2,67 billones del mercado, apoyando así los esfuerzos del Banco Central por estabilizar el tipo de cambio en los meses previos a los vencimientos de deuda.
En paralelo, el equipo económico lleva adelante negociaciones con bancos internacionales para obtener un préstamo “repo” y mantiene conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre un posible nuevo esquema de financiamiento. Estas acciones tienen como objetivo asegurar el cumplimiento de los compromisos de deuda en moneda extranjera sin recurrir a una emisión excesiva de pesos, y al mismo tiempo reforzar las reservas del BCRA, que en octubre han crecido en casi USD 1.500 millones.
El director del BCRA, Federico Furiase, explicó que la reducción de pesos generada por esta compra ayuda a compensar la expansión monetaria derivada de intervenciones recientes en el mercado cambiario. Para los compromisos de 2025, se están evaluando alternativas como el canje de bonos en manos de organismos públicos, como ANSES y el BCRA, y la regularización de activos no declarados en el país, cuya recaudación estimada asciende a USD 32.000 millones.
La compra de divisas refuerza el enfoque fiscal y monetario del Gobierno de Caputo, orientado hacia una administración prudente de la deuda y un control estricto de la base monetaria, con miras a estabilizar la economía y reducir la presión sobre el peso en un contexto de alza en el valor de los bonos argentinos.
