El Estado Islámico reivindica atentado en Afganistán que dejó tres españoles muertos
El Estado Islámico (EI) ha reivindicado la autoría del atentado en Afganistán que resultó en la muerte de tres ciudadanos españoles. El ataque, perpetrado el sábado, ha causado conmoción tanto en Afganistán como en España, y ha sido condenado internacionalmente.
El ataque tuvo lugar en la provincia de Nangarhar, una región conocida por la actividad de militantes del EI. Los tres españoles fallecidos formaban parte de una misión humanitaria que trabajaba en la zona para proporcionar asistencia médica y apoyo a comunidades locales afectadas por el conflicto. Además de los tres muertos, el atentado dejó varios heridos, entre ellos personal afgano que acompañaba a los españoles.
En un comunicado difundido a través de sus canales habituales, el Estado Islámico afirmó que el atentado fue dirigido específicamente contra extranjeros presentes en Afganistán, calificándolos de «invasores». El grupo extremista detalló que el ataque se realizó mediante un coche bomba que explotó cerca del convoy en el que se desplazaban las víctimas.
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, expresó sus condolencias a las familias de los fallecidos y condenó enérgicamente el atentado. «Es un día trágico para España y para todos los que valoramos la paz y la cooperación internacional. No descansaremos hasta que los responsables de este acto cobarde sean llevados ante la justicia», declaró Sánchez.
Las autoridades afganas también condenaron el ataque y prometieron reforzar las medidas de seguridad para proteger a los trabajadores humanitarios y otros extranjeros en el país. «Este acto atroz no quedará impune. Estamos trabajando con nuestros socios internacionales para garantizar que los perpetradores sean capturados y juzgados», afirmó el ministro del Interior de Afganistán, Massoud Andarabi.
La comunidad internacional ha mostrado su solidaridad con España y ha reiterado su compromiso en la lucha contra el terrorismo. La Unión Europea, a través de su alto representante para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, expresó su repudio al ataque y subrayó la importancia de la cooperación internacional para combatir el extremismo violento.