«Donald Trump planea retirar a EE. UU. del acuerdo climático de París y abrir monumentos nacionales a la perforación»
El equipo de transición del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha comenzado a elaborar una serie de órdenes ejecutivas y proclamaciones para retirar al país del acuerdo climático de París y reducir la protección de algunos monumentos nacionales, permitiendo así una mayor explotación de recursos naturales. Según informó el New York Times, estas decisiones también contemplan el fin de la pausa en la autorización de nuevas exportaciones de gas natural licuado (GNL) a grandes mercados de Asia y Europa y la revocación de una exención que permite a California y otros estados establecer estándares de contaminación más estrictos que los federales.
Karoline Leavitt, portavoz del equipo de transición, confirmó que Trump considera los resultados de las elecciones como un “mandato para implementar las promesas de campaña”. Durante su campaña, Trump enfatizó su intención de tomar medidas para reducir regulaciones ambientales en aras de impulsar la independencia energética de EE. UU. y reactivar sectores como el petróleo y el gas.
Impacto ambiental y controversias
La posible retirada del acuerdo de París representa un giro significativo respecto al compromiso internacional de EE. UU. para reducir emisiones y combatir el cambio climático, y plantea preocupaciones sobre el rol de la nación en la cooperación ambiental global. Además, la propuesta de modificar los límites de ciertos monumentos nacionales permitiría la exploración y explotación minera en zonas que actualmente gozan de protección ambiental, lo cual ha generado críticas de ambientalistas y defensores del patrimonio natural.
Otra medida controversial es la intención de revocar la exención que permite a estados como California aplicar regulaciones de contaminación más estrictas. Este cambio afectaría directamente los estándares de emisiones de vehículos y podría dificultar los esfuerzos para reducir la contaminación en zonas de alta densidad poblacional.
Nueva política energética
Se espera que el presidente electo también elimine las restricciones impuestas por el gobierno de Joe Biden en enero pasado para la aprobación de nuevas exportaciones de GNL. Esta decisión, junto con el eventual aumento de la perforación y extracción de recursos en EE. UU., apunta a una estrategia de autosuficiencia energética en la que se privilegia el uso de combustibles fósiles, lo que ha generado una fuerte reacción en el ámbito ambientalista.
Algunas fuentes han indicado que el equipo de transición incluso evalúa trasladar la sede de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) fuera de Washington, como parte de su visión de reducir la influencia de los reguladores ambientales en las políticas energéticas.
Las decisiones anunciadas ponen a EE. UU. en un camino de confrontación con las iniciativas ambientales globales, generando un panorama de incertidumbre para los acuerdos internacionales y políticas locales de mitigación climática.