Diez policías iraníes mueren en un ataque terrorista en la conflictiva región de Sistán y Baluchistán
Al menos diez policías iraníes perdieron la vida el sábado en una emboscada organizada por el grupo yihadista Jaish al-Adl en la provincia de Sistán y Baluchistán, ubicada en el sureste de Irán. El ataque ocurrió en la localidad de Gohar Kuh, en una región caracterizada por sus conflictos y la actividad insurgente que afecta la seguridad y el desarrollo local.
Un ataque violento y un grupo responsable
El grupo yihadista Jaish al-Adl, una organización sunita conocida anteriormente como Jundallah y famosa por sus ataques a autoridades chiítas, reivindicó la responsabilidad del ataque. Este grupo insurgente ha protagonizado múltiples ataques en la región, donde sus operaciones buscan desestabilizar las fuerzas de seguridad del país.
El grupo HalVash, defensor de los derechos del pueblo baluchi en la región, difundió imágenes y videos que muestran uno de los vehículos policiales iraníes dañado por el ataque, evidenciando la magnitud del atentado y la violencia del conflicto en la zona.
Respuesta de las autoridades iraníes
Eskandar Momeni, ministro del Interior de Irán, ha ordenado una investigación inmediata sobre el incidente. El gobierno iraní se ha comprometido a capturar a los responsables y a reforzar la seguridad en esta área fronteriza con Pakistán y Afganistán, una región frecuentemente afectada por actividades insurgentes y conflictos internos.
Una región en conflicto
Sistán y Baluchistán es una de las provincias menos desarrolladas de Irán y enfrenta una constante inestabilidad debido a su posición geográfica y a las tensiones étnicas y religiosas que la afectan. Este ataque subraya la persistente inseguridad y el desafío que enfrentan las autoridades iraníes para mantener la paz en la zona.