Del Ártico al Antártico: elementos para pensar en una política de cooperación hemisférica

En un contexto marcado por la preocupación por la presencia de potencias extranjeras en América Latina, la reciente visita de la Jefa del Comando Sur del Ejército de los Estados Unidos, General Laura Richardson, ha avivado el debate sobre la necesidad de una política de cooperación hemisférica. en la región.

La General Richardson expresó su inquietud por la base de observación espacial china en la provincia argentina de Neuquén y por las inversiones de China en la región, lo que subraya la importancia de una mayor coordinación entre los países del continente americano.

Durante su visita a Argentina, la General Richardson se reunió con diversas autoridades, incluido el Presidente Milei, quien anunció la construcción de una base naval conjunta con los Estados Unidos en Ushuaia. Esta iniciativa busca establecer un centro logístico que facilite el acceso a la Antártida y fortalezca la presencia de ambos países en la región.

Además, la General Richardson mantuvo un encuentro con la vicepresidenta de Argentina, Victoria Villarruel, en el cual se abordaron temas estratégicos en común, como energía, alimentos y desafíos continentales.

El alineamiento entre Argentina y los Estados Unidos, si bien históricamente ha sido variable, se presenta como una opción para enfrentar los desafíos actuales. Sin embargo, es crucial evaluar su sostenibilidad a largo plazo, considerando las oscilaciones que han caracterizado esta relación en el pasado.

El contexto geopolítico actual plantea nuevos desafíos y oportunidades para una política hemisférica en América. En este sentido, es fundamental identificar áreas de cooperación que promuevan el desarrollo sostenible y la seguridad en la región.

Una posible área de cooperación es la producción de alimentos y energía, donde los países americanos son importantes actores a nivel mundial. Una política continental permitiría establecer precios justos y enfrentar barreras comerciales impuestas por potencias extranjeras.

Asimismo, la protección del medio ambiente y la preservación de los recursos naturales son temas prioritarios que requieren una acción conjunta de los países americanos. La implementación de políticas de cooperación puede contribuir a mitigar el daño ambiental y garantizar la sustentabilidad de los recursos.

En el ámbito de la seguridad, la cooperación en el Atlántico Sur y la defensa de la soberanía territorial son temas centrales que requieren una respuesta conjunta de los países de la región.

Sin embargo, existen obstáculos que podrían dificultar la implementación de una política hemisférica, tanto a nivel interno como externo. Consideraciones ideológicas y la reacción de otros actores regionales pueden influir en la viabilidad y el alcance de esta iniciativa.