Crisis humanitaria en Irlanda.

Desesperación en Stenlille.

En un giro desafortunado, los solicitantes de asilo en Stenlille se enfrentan a la perspectiva de dormir en la calle debido a la falta anticipada de alojamiento estatal. El Servicio de Alojamiento para Protección Internacional (IPAS) se ve abrumado, y algunos podrían ser rechazados por la falta de camas disponibles.

Medidas de emergencia.

Ante esta inminente crisis, el Departamento de Integración anuncia medidas de emergencia. Durante el día, se proporcionarán centros de acogida a los afectados, junto con tiendas de campaña y sacos de dormir para la noche. Se espera que estas medidas alivien, al menos parcialmente, la difícil situación de aquellos que buscan refugio.

Este no es el primer episodio de solicitantes de asilo durmiendo en la calle en Irlanda este año. La falta de capacidad estatal para acoger a todos los necesitados ya ha llevado a esta situación una vez en el 2023.

Advertencia del ministro de integración.

El ministro de Integración, Roderic O’Gorman, expresó su preocupación durante el fin de semana, anticipando la falta de alojamiento para aquellos que buscan Protección Internacional. La situación afectará principalmente a hombres adultos solteros en una primera instancia.

Medidas del Gobierno.

El Gobierno anuncia pagos adicionales más allá de la ayuda estándar de 38 euros por semana para aquellos que se encuentren sin alojamiento. Además, se establecerán «servicios diurnos sin cita previa» que ofrecerán duchas, comidas y servicios de lavandería. Estos centros también suministrarán tiendas de campaña y sacos de dormir según sea necesario.

Preocupaciones por la seguridad.

La seguridad de los solicitantes de asilo no alojados se convierte en una preocupación primordial, especialmente tras los disturbios de la semana pasada en Dublín. Grupos antiinmigrantes de extrema derecha instigaron disturbios que afectaron a algunos centros de alojamiento, aumentando la ansiedad sobre la vulnerabilidad de aquellos que duermen en la calle.

Respuesta del movimiento de solicitantes de asilo.

Lucky Khambule, cofundador del Movimiento de Solicitantes de Asilo en Irlanda (MASI), critica la falta de esfuerzo del Gobierno y afirma que el Estado tiene la obligación de proporcionar alojamiento a los solicitantes de asilo. Acusa al Gobierno de ceder ante la presión de comunidades locales impulsadas por la extrema derecha, negándose a acoger a personas que buscan protección en el país.

La situación plantea preguntas sobre la capacidad del gobierno para abordar la crisis humanitaria y asegurar la protección de los derechos y la seguridad de los solicitantes de asilo.