Corea del Norte acusa a EE. UU. y Corea del Sur de provocar con ejercicios militares.
En medio de la creciente tensión en la región, Corea del Norte ha acusado a Estados Unidos, Corea del Sur y sus aliados de llevar a cabo ejercicios militares conjuntos con el objetivo de atemorizar a Pyongyang. La denuncia se realizó en el contexto de los ejercicios «Freedom Shield», que involucran a diez países bajo el liderazgo del Comando de la ONU, encabezado por Estados Unidos.
En una columna publicada por la agencia estatal KCNA, un portavoz del Ministerio de Defensa Nacional norcoreano cuestionó la realización de estos ejercicios, señalando que la situación de seguridad en la región es «inestable». Los ejercicios, que comenzaron el lunes, son parte de las maniobras de primavera y han sido objeto de críticas por parte de Corea del Norte.
El portavoz afirmó que los ejercicios de guerra realizados por Corea del Sur y las fuerzas aliadas lideradas por Estados Unidos contrastan con los esfuerzos de Corea del Norte por movilizar fuerzas militares a gran escala para impulsar el desarrollo económico y mejorar el bienestar del pueblo.
Tanto Seúl como Washington defienden los ejercicios, calificándolos como defensivos. Sin embargo, Corea del Norte considera que estas acciones son provocativas y amenazantes. El portavoz norcoreano pidió detener las acciones que aumentan la provocación e inestabilidad, destacando que los ejercicios militares evidencian una amenaza militar a un Estado soberano y un intento de invasión.
Aunque Corea del Norte no ha llevado a cabo pruebas de armas en las últimas semanas, la realización de estos ejercicios se produce en un momento de mayor hostilidad, marcado por la declaración de Corea del Norte de que el Sur es su principal enemigo y la eliminación de la meta de reunificación de la Constitución. La situación sigue siendo delicada, y Corea del Norte afirma que seguirá llevando a cabo actividades militares de manera responsable para controlar el entorno de seguridad inestable en la península coreana.