China reafirma su plan de paz para Ucrania y su enfoque en desescalar el conflicto con Rusia

China subrayó su compromiso de mediar en el conflicto en Ucrania mediante un plan de paz desarrollado junto a Brasil, cuyo objetivo principal es «reducir las tensiones» y evitar que la guerra escale a niveles más peligrosos. Mao Ning, portavoz del Ministerio de Exteriores chino, destacó que el consenso alcanzado en este plan se centra en seis puntos clave que priorizan la desescalada y la estabilización del territorio ucraniano.

Un plan de paz con enfoque en la desescalada

La propuesta, según Mao, pone un énfasis particular en tres principios fundamentales para reducir el conflicto entre Rusia y Ucrania. Primero, evitar la expansión del conflicto más allá de las fronteras actuales. Segundo, prevenir que el conflicto bélico escale aún más. Y tercero, evitar medidas que «aviven las llamas» del enfrentamiento. Estos principios buscan frenar la escalada militar y promover un diálogo abierto que permita avanzar hacia una solución diplomática y pacífica.

Además, el plan de paz incluye recomendaciones para aumentar la ayuda humanitaria en las zonas más afectadas, así como rechazar tanto el uso de armas nucleares como los ataques a instalaciones nucleares, dos puntos que generan gran preocupación internacional por el riesgo de catástrofes a gran escala.

Receptividad internacional

La vocera del Ministerio de Exteriores chino también destacó la amplia acogida que ha tenido este plan de paz, presentado el 24 de mayo, en el seno de la comunidad internacional. De acuerdo con Mao Ning, más de 110 países han expresado su apoyo a esta iniciativa, que se alinea con las expectativas globales de estabilizar la región y proteger las cadenas de suministro internacionales, afectadas por las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania.

China ha mantenido una postura compleja desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022. Por un lado, Beijing ha insistido en la necesidad de respetar la integridad territorial de todos los países, un mensaje que va en sintonía con las demandas de Ucrania y otras naciones afectadas por el conflicto. Sin embargo, también ha mostrado sensibilidad hacia lo que denomina las «legítimas preocupaciones» de Rusia, manteniendo una relación cercana con Moscú, especialmente en el ámbito comercial.

Negación de apoyo militar a Rusia

A pesar de su proximidad con el Kremlin, el gobierno chino ha negado repetidamente las acusaciones de estar proporcionando ayuda militar directa a Rusia. Beijing insiste en que su relación comercial con Moscú sigue siendo «normal» y se circunscribe a áreas que no están vinculadas con el desarrollo militar. Sin embargo, Estados Unidos y otras potencias occidentales han acusado a empresas chinas de suministrar equipos que podrían estar siendo utilizados en la fabricación de misiles balísticos por parte de Rusia.

A medida que crece la presión internacional para que China use su influencia sobre el presidente ruso, Vladimir Putin, y ejerza un rol más activo en la resolución del conflicto, Beijing ha sostenido que la responsabilidad de poner fin a la guerra recae directamente sobre las partes involucradas.

El rol de la negociación en los conflictos internacionales

Además del conflicto en Ucrania, China también ha mostrado preocupación por la escalada de violencia en Gaza y ha reiterado que la solución a ambos conflictos debe ser a través de la negociación. En una reciente conferencia de prensa, el ministro de Defensa de China, Dong Jun, subrayó que «la solución pacífica» es «la única salida» tanto para la guerra en Ucrania como para el conflicto en Gaza, llamando a las partes a buscar la reconciliación y a preservar un «orden internacional justo».

Dong destacó la disposición de China para colaborar con otras naciones y sus fuerzas armadas en la búsqueda de una paz duradera, haciendo hincapié en que cada país tiene derecho a salvaguardar su seguridad e intereses, pero que esto debe hacerse dentro de un marco de justicia internacional que permita resolver los problemas sin recurrir a la violencia.

El llamado de China a la negociación y la desescalada sigue siendo una constante en su diplomacia, mientras busca posicionarse como un mediador clave en la resolución de algunos de los conflictos más críticos del escenario mundial actual.