China implementa ley de secretos de Estado que restringe contenido en Redes Sociales
La nueva legislación china amplía los datos confidenciales y establece medidas para controlar la información en plataformas digitales, generando preocupación por posibles limitaciones a la libertad de expresión y acceso a la información.
China ha puesto en marcha una nueva ley revisada de secretos de Estado que amplía la categoría de información confidencial e incluye por primera vez a las plataformas de información en internet como sujetas a requisitos de confidencialidad. La legislación, que no había sido actualizada desde 2010, busca controlar la circulación de información sensible en el ciberespacio y proteger los intereses nacionales.
Empresas digitales como Tencent, Weibo y ByteDance, propietaria de TikTok, se ven afectadas por esta normativa, ya que deben implementar medidas para eliminar contenido problemático y colaborar con investigaciones gubernamentales relacionadas con filtraciones de datos sensibles. Además, se les exige vigilar de cerca las actividades de los usuarios y reportar cualquier actividad sospechosa a las autoridades.
La ley revisada también impone restricciones más estrictas a los trabajadores estatales que manejan información clasificada, limitando su capacidad para trabajar en empresas privadas o extranjeras después de abandonar sus cargos públicos. Esta medida refleja la preocupación del gobierno chino por fortalecer su liderazgo y salvaguardar la seguridad nacional ante nuevas formas de espionaje y amenazas cibernéticas.
Sin embargo, estas medidas han generado preocupación entre algunos sectores debido a la posible ambigüedad en la definición de «secreto de Estado», lo que podría conducir a limitaciones en la libertad de expresión y acceso a la información. La promulgación de esta ley durante la pasada sesión anual de la Asamblea Nacional Popular ha sembrado inquietud entre inversores extranjeros y consultoras que operan en el país.
La implementación de esta ley refleja la determinación del Partido Comunista de China de fortalecer su control sobre el flujo de información en línea y proteger sus intereses en un entorno cada vez más digitalizado y globalizado.