Brasil endurece condiciones en cárceles federales.
El Gobierno brasileño anunció medidas más estrictas en las cárceles federales del país después de la fuga de dos presos de una prisión considerada de «máxima seguridad». Los reclusos, miembros del grupo criminal «Comando Vermelho», escaparon de la cárcel federal de Mossoró, en el noreste del país, en un incidente calificado como «inusitado». Los dos fugitivos, con condenas de 74 y 81 años, estaban alojados en la prisión desde septiembre de 2023.
En respuesta, se suspendieron las visitas en las cárceles federales, y los presos deberán permanecer en sus celdas durante los próximos cinco días. Además, se anunció la modernización de la infraestructura de seguridad de todas las cárceles federales, se abrió una investigación para determinar posibles complicidades internas en la fuga, y se suspendió a los directores del penal de Mossoró.
Estas medidas se toman en un contexto de sobrepoblación carcelaria en Brasil, donde a fines de 2023 había 832,300 personas encarceladas en un sistema con capacidad para 600,000 detenidos. La fuga resalta la necesidad de mejorar la seguridad en las cárceles y abordar los desafíos en el sistema penitenciario del país.
