Ataque Ruso sacude a Ucrania.
La llegada del Año Nuevo en Ucrania estuvo marcada por un ataque aéreo sin precedentes por parte de Rusia, que lanzó un número récord de drones de ataque durante 11 horas en diversas regiones, incluyendo Odesa y Leópolis. La Fuerza Aérea ucraniana informó que derribaron 87 de los 90 drones utilizados en el ataque.
Según las Fuerzas de Defensa del Sur, el poderoso ataque masivo con drones kamikaze se prolongó desde la tarde hasta las primeras horas de la mañana, afectando áreas como Mikoláyiv, Vínitsia, Dnipropetrovsk, Jersón y la región de Kirovogrado, además de Leópolis. Los misiles lanzados atacaron Járkiv, Jersón y Zaporiyia.
En Odesa, la infraestructura portuaria fue el objetivo prioritario, resultando en un incendio en una terminal portuaria, aunque fue rápidamente controlado. Lamentablemente, una persona perdió la vida en Leópolis, y la ciudad denunció el ataque a dos objetos de memoria nacional: la universidad de Dubliany y el museo dedicado al comandante del Ejército Insurgente Ucraniano (UPA), Román Shujévich.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, expresó su determinación en defender el país y garantizar la seguridad de la población, mientras que el ministro de Exteriores, Dmitró Kuleba, hizo un llamado urgente a una «asistencia militar y financiera continuada, robusta y a largo plazo» para enfrentar los bombardeos rusos.
El ministro de Defensa, Rustem Umérov, advirtió sobre la capacidad de Rusia para realizar ataques similares en el futuro y aseguró que Ucrania seguirá colaborando con países aliados para fortalecer sus defensas antiaéreas. La situación sigue siendo crítica, y el país se mantiene a la defensiva mientras busca apoyo internacional para hacer frente a la escalada de hostilidades.
