Aduana dona más de 4 toneladas de calzado deportivo incautado
En un gesto significativo, la Dirección General de Aduanas de Argentina entregó más de 4 toneladas de calzado deportivo incautado para su donación a sectores vulnerables. Estos productos, que consisten en casi 8,000 pares de zapatillas, fueron confiscados debido a irregularidades en el comercio internacional y estaban destinados a ser destruidos. Sin embargo, la intervención del Juzgado Nacional en lo Penal Económico N° 6, a cargo del juez Marcelo Aguinsky, permitió que fueran redistribuidos para beneficio social.
El calzado incautado estaba relacionado con una causa judicial por fraude marcario. Las zapatillas llevaban inscripciones falsas de la marca New Balance. En la mayoría de los casos, las mercancías falsificadas son destruidas por orden de las empresas titulares de las marcas. No obstante, en esta ocasión, se optó por una alternativa más beneficiosa para la comunidad, siguiendo el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 51/17, que permite la donación de bienes incautados.
El juez Aguinsky destacó que los productos incautados estaban en doble infracción: primero, como parte de un intento de contrabando, y segundo, por la falsificación de una marca registrada. A pesar de estos delitos, las autoridades judiciales y los representantes legales de la empresa New Balance, junto con Cáritas Argentina, decidieron proceder con la donación. Esta decisión marca un precedente en la gestión de bienes incautados, orientándose hacia un uso socialmente responsable.
Las más de 4 toneladas de calzado, equivalentes a 4,229 kg, fueron entregadas a diversas organizaciones sociales y comunitarias que trabajan en las áreas más necesitadas del país. La iniciativa busca cerrar un ciclo virtuoso, donde los bienes originalmente destinados al mercado ilegal encuentran un propósito útil y benefactor en la sociedad.
La redistribución de estos bienes tiene un impacto significativo en las comunidades receptoras. En particular, el calzado deportivo puede beneficiar a niños y jóvenes de sectores vulnerables, proporcionando recursos esenciales para su desarrollo y bienestar. Además, esta acción refuerza la importancia de la responsabilidad social y la colaboración entre entidades gubernamentales y privadas.
El juez Marcelo Aguinsky expresó su satisfacción con la decisión de donación, subrayando el valor de convertir un acto ilícito en una oportunidad para el bien común. «Estos productos secuestrados en condiciones de ser donados se hallan en doble infracción, por lo que su donación supone un uso provechoso que contribuye directamente a mejorar la calidad de vida de muchos argentinos», afirmó.
Este caso podría servir como modelo para futuras incautaciones de bienes involucrados en delitos de contrabando y falsificación. La Aduana y otras entidades podrían considerar con más frecuencia la opción de la donación, promoviendo una gestión más ética y socialmente consciente de los recursos incautados.